"Un paseo americano por Madrid debe empezar por el museo"
Paz Cabello y otros 40 profesionales han defendido los tesoros de la nave del Museo de América durante los 13 años que ha permanecido en dique seco. Los bucaneros que acosaban el barco varado en mitad del parque un recorrido del Oeste eran los escombros de unas obras interminables y algunos in quilinos, que hubo que tras ladar a otras sedes. Cabello (45 años), doctora en Historia del Arte, entró a formar parte de la tripulación del museo como restauradora en 1974 y heredó el puesto de capitana tras jubilarse el director en 1992. Los Reyes inauguran hoy el museo recién reformado, casi 30 años después de su primera apertura.Pregunta. ¿Qué tesoros se han perdido los madrileños durante 13 años?
Respuesta.. Entre los mejores están la Estela de Madrid (una de las patas con bajorrelieve del trono de la ciudad maya de Palenque) y el tesoro de los quimbayas de oro, donado por la República de Colombia tras el cuarto centenario. Estas donaciones eran habituales, no había legislación sobre defensa del patrimonio. Por ejemplo, cuando estuve en Costa Rica en 1975 había una manifestación de ladrones de tumbas, que estaban sindicados, porque no les dejaban trabajar.
P. ¿Cómo se vive 13 años en un museo cerrado?
R. El día a día lo vives igual, porque tu trabajo de investigación y catalogación de piezas no lo haces cara al público.
P. ¿Y qué pasaba dentro del museo mientras la gente paseaba fuera por el parque del Oeste?
R. Trabajábamos en mitad de las obras. Aquí ahora huele a pintura, pero esto no es nada, hemos estado sin calefacción en un sitio muy frío, por que estamos en la Ciudad Universitaria. Protegía mos las piezas cambiando las de un sitio para otro, a veces saltando por escombros. La gente decía que no le duraban nada los zapatos.
P. ¿Puede recomendar americano por Madrid?
R. El paseo debe empezar por el museo, naturalmente, y luego seguir por el Etnológico, donde hay algunas colecciones. En el Museo Naval también tienen piezas, porque las expediciones científicas iban en barco y algunas documentaciones fueron a parar allí. La Academia de Historia también tiene algo, y por último, la Casa de América, donde hay exposiciones temporales.
P. ¿Las cabezas reducidas de los jíbaros son las estrellas del museo?
R. Se van a ver mucho, todo el mundo las recuerda porque tienen morbo. Tenemos además una reproducción de una casa jíbara y allí hemos puesto una cabeza falsa. El comercio de cabezas reducidas es muy dificultoso y muchas son falsas, hay gente que viene con su cabeza falsa tan contenta y te la quiere regalar y todo.
P. ¿Cómo llegaron a Madrid las piezas del museo?
R. Las colecciones reales se pierden con el incendio del Alcázar de Madrid, pero se mandan nuevas expediciones científicas para traer plantas y objetos. Unas piezas las cambian a los indígenas por vestidos o cuentas; otras son regalos. Todo eso se junta en el Real Gabinete de Historia Natural, que en el XIX se convertirá en Museo de Ciencias Naturales, y en los años treinta se funda el Museo de América.
Museo de América. Avenida de los Reyes Católicos, s / n. Entrada, 400 pesetas.
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