El juez rehusó interrogar a Bermúdez de Castro por ser diputado regional

El juez Rafael Mozo, instructor del presunto fraude en votos por correo tramitados en la sede del PP en las elecciones locales, rehusó interrogar ayer al diputado regional José Antonio Bermúdez de Castro, asesor jurídico del PP, tras conocer que se trataba de un aforado (al ser parlamentario regional, sólo puede interrogarle el Tribunal Superior). Mozo decidió también retirarle la condición de imputado.

El fiscal deberá concretar ahora por escrito al juez si cree necesario, que se tome declaración al diputado. Si así fuera, Bermúdez de Castro puede ser citado nuevamente para declarar. Pero en ese caso el magistrado debe inhibirse en favor del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.Bermúdez de Castro negó, tras salir del juzgado, cualquier implicación en el supuesto fraude postal: "Yo era el coordinador nacional de formación del partido; lo único que hice fue enviar fotocopias con la normativa electoral a todas las organizaciones territoriales; nada más". El diputado agregó: "Venía dispuesto a declarar, aunque el juez no ha querido, dada mi condición de diputado".

El abogado Juan Francisco Pla, personado en las diligencias en nombre de Izquierda Unida, insistió ayer en que en la sede del PP se cometieron, presuntamente, un delito electoral (unas personas votaron en lugar de otras) y otro de falsedad: el notario Alberto Ballarín ha reconocido ante el juez, subrayó Pla, que su firma fue falsificada en el proceso de legitimación de muchos de los votos que se gestionaron desde la calle de Génova, 13. Izquierda Unida cifra en unas 3.000 las firmas de Ballarín fálsificadas, hecho que cometieron "tres manos distintas", según Pla. En el sumario figuran también falsos certificados médicos con los que se intentó justificar la invalidez de personas perfectamente sanas con objeto de que pudieran delegar en el PP el trámite del voto postal.

El abogado del PP en esta causa, Juan Ramón Montero, reiteró lo que ya dijo el pasado viernes al término del interrogatorio de la militante María Antonia Astudillo, también citada en calidad de imputada: "En ningún caso ha existido una falsedad ideológica: cerca de un centenar de personas tiene declarado que su intención era votar al PP". Pla, en cambio, citó que al menos se han comprobado dos casos de personas suplantadas.

Con la comparecencia de Bermúdez de Castro concluye, en principio, la fase de investigación.

En los tres años de instrucción del sumario el juez no ha ordenado ninguna. prueba caligráfica que aclare si quienes rellenaron los datos de los electores y firmaron como apoderados en los trámites del voto fueron también quienes falsificaron la rúbrica del notario. En el caso del voto falso de Javier Juste Ballesta, la letra be de este apellido, escrita por el apoderado del PP que votó por él (y cuya firma figura también en el documento), es prácticamente igual -además de otras similitudes- a la be con que se escribió la firma de "Ballarín".