La afición convierte a Martín Vázquez en el centro de sus críticas
Martín Vázquez, el culpable. Un sector de la afición madridista ha levantado su dedo acusador contra el centrocampista madrileño y le ha convertido en el centro de sus críticas tras la dolorosa derrota del martes ante el Tenerife (0-3). Ya fue el jugador más recriminado durante dicho partido, incluso necesitó de la colaboración de la policía para salir indemne del Santiago Bernabéu, y también lo fue ayer durante el entrenamiento. Los hinchas recibieron a todo el equipo con aplausos y gritos de ánimo, pero no a Martín Vázquez. Es la nueva víctima del madridismo. Bueno, y los medios de comunicación, que también fueron sonoramente increpados.El jugador eludió hacer comentarios sobre el comportamiento del público. Sí habló, en cambio, de la situación que vive su club: "El ambiente no es excesivamente bueno por culpa de los resultados. Por ello, estamos cuestionados todos. Es un mal momento del que hay que salir mostrándonos más unidos que nunca, intentando mejorar los resultados y esperando que llegue por fin la fortuna".
"El Madrid camina con la cabeza bien alta", añadió, "ya que aunque no hace todo lo quiere, sí todo lo que puede. Seguiremos dando todo en los próximos encuentros, como ante el Tenerife, pero luego dependerá del acierto y la suerte que nos acompañe".
Como la mayoría de los futbolistas consultados, Martín Vázquez resaltó la importancia de olvidar cuanto antes la derrota del martes. Sobre todo, ante la trascendencia del compromiso del sábado ante el Deportivo, en el que el Madrid se juega todas las opciones que le quedan para aspirar al título de Liga. "Hay que pensar en el partido del sábado", afirmó, "que va a ser muy importante y complicado. Según están las cosas, puede ser muy decisivo. Una victoria nos ayudaría a coger moral".
El ánimo caído
'Los jugadores del Madrid andan con el ánimo caído, aunque tratan de aparentar lo contrario. Reconocen su pesar por la eliminación de la Copa del Rey, pero se muestran satisfechos de su actitud sobre el campo. Algunos, justificaron la derrota en la actuación del colegiado Martín Navarrete. "Cuando las injusticias son tan grandes", comentó Fernando Hierro, "hay que decirlas y criticarlas". Zamorano, pese a admitir que no sería justo excusarse en el arbitraje, criticó al colegiado: "Un árbitro tan veterano como él no puede estar tan nervioso en el campo".
Con todo, toda la plantilla se pronuncia convencida de lograr enderezar el rumbo. "No mantenemos una regularidad", añadió Hierro, "o no jugamos bien. Esta temporada nos toca sufrir, pero vamos a salir adelante". Algo parecido piensa Milla: "No hay más remedio que olvidar el encuentro del martes y pensar sólo en el del Deportivo. Vamos a ponerlo todo para sacar adelante ese partido".
