Antonio Anglés es buscado en Irlanda, tras huir hace 10 días de Portugal escondido en un barco
Antonio Anglés, el presunto asesino de las tres niñas de Alcàsser, está siendo buscado en Irlanda, tras haber logrado escapar el pasado día 18 de Portugal, escondido en un barco que zarpó del puerto lisboeta de Trafaria. Cuando la tripulación descubrió al polizón, éste fue recluido en un camarote, de donde logró salir posiblemente después de sobornar a un marinero. A continuación huyó del mercante en un bote, según fuentes de la policía española. Interior decidirá hoy si guardias civiles y policías se trasladan a Irlanda.
El supuesto autor del triple crimen de Alcasser estuvo hace un mes oculto en la casa de un atracador del distrito madrileño de Chamartín. Pero cuando los agentes lograron conocer esta circunstancia, el fugitivo había abandonado la vivienda.El presunto asesino llegó a Madrid buscando el apoyo de un amigo con el que estuvo en la prisión de Valencia. Este, en lugar de darle acogida en su domicilio, pidió a una tercera persona que cobijara a Anglés. El individuo que facilitó refugio al peligroso delincuente es un atracador de bancos, que fue detenido el mes pasado.
Anglés prosiguió su huida hacia Portugal, cuya frontera cruzó probablemente a pie, según fuentes policiales. Al llegar a Lisboa entró en contacto con un drogadicto de la zona portuaria, que le ocultó durante varios días. El pasado día 18, Anglés logró subir a un barco que zarpó con destino a Dublín (Irlanda), según han confirmado fuentes de la policías portuguesa y española.
La tripulación del mercante descubrió al intruso durante la travesía y procedió a arrestarle en un camarote. Al preguntarle su nombre y nacionalidad, Anglés mintió y suplantó la identidad del drogadicto portugués que le tuvo cobijado en Lisboa. El responsable del barco anunció al polizón que le entregaría a las autoridades irlandesas nada más tocar tierra.
El capitán del buque reparó en su momento en los tatuajes que luce Anglés (un esqueleto con una guadaña y una chinita con un paraguas), pero ignoraba que tenía delante al hombre más buscado de España.
Los marineros han declarado a la policía que el polizón logró escapar del camarote, posiblemente sobornando a uno de ellos, ya que se supone que todavía conserva buena parte de los dos millones de pesetas que sustrajo a su madre, Neusa Martíns, cuando el 27 de enero pasado huyó de su casa de Catarroja (Valencia) antes de la irrupción de la Guardia Civil. Anglés habría conseguido un bote salvavidas equipado con un motor; cuando este hecho fue advertido por la tripulación, ya era demasiado tarde.
Confesión del drogadicto
Varios inspectores del Servicio Central de Policía Judicial. enviados hace 15 días a Lisboa por el secretario de Estado para la Seguridad, Rafael Vera, han llegado a "pisar los talones" a Anglés, según las fuentes informantes. En el curso de sus investigaciones han confirmado "plenamente" que el individuo que escapó en el barco es Antonio Anglés: el capitán del barco y el drogadicto que le dio asilo en Lisboa le han reconocido tanto fotográficamente como por los característicos tatuajes que tiene en los brazos.
Las pesquisas de la policía española en Portugal no han impedido que en España hayan continuado los rastreos en busca del peligroso delincuente. El pasado miércoles, numerosos agentes cercaron un hipermercado cercano a la localidad madrileña de Getafe, después de que los empleados descubrieran a un individuo de "gran parecido físico" con Anglés.
Hoy se cumplen dos meses del hallazgo de los cadáveres de Miriam García, Antonia Gómez y Desirée Hernández enterrados en un monte cercano a Catadau. Las tres habían desaparecido el 13 de noviembre, cuando se dirigían a una discoteca de Picasent (Valencia). Fernando García, el padre de Miriam, pretende recoger 500.000 firmas para pedir que "los violadores cumplan íntegramente su condena, sin que puedan ser beneficiarios de la libertad condicional".
