_
_
_
_

Major se suma a la ofensiva europea a favor del Tratado de Maastricht

John Major, en el discurso más europeísta de su carrera, lanzó ayer en Londres un cable a los defensores del sí a Maastricht en el referéndum del día 20 en Francia. El Tratado de Unión Europea, señaló el primer ministro británico, "es la llave del progreso". "Europa no puede estar inmóvil si el mundo cambia; si la Comunidad Europea se detuviera, en realidad retrocedería", declaró Major, que anunció además que a final de mes negociará con Dinamarca (que rechazó el tratado en referéndum el 2 de junio) la forma de incorporar a este país a la construcción europea.

Ayer no fue un mal día para los partidarios de la ratificación del Tratado de Maastricht. Al empujón dado por Major se unió el de Carl Bildt, primer ministro de Suecia (país que encabeza la lista de aspirantes a entrar en la CE), que urgió a los Doce a estrechar su unidad política, económica y monetaria; el de Jacques Attali, presidente del Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo, para quien el triunfo del no sería un desastre para la paz, y el del primer ministro danés, Poul Schlüter, que aseguró que su Gobierno se propone convocar otro referéndum en el primer semestre de 1993. Pero hubo más: otro sondeo en Francia que, como los posteriores a la intervención televisiva de François Mitterrand, el pasado jueves, refleja el retroceso de los partidarios del no. La encuesta, encargada por el semanario VSD a la firma Louis Harris, da al sí un 59% de las intenciones de voto, el resultado más amplio en muchas semanas.Los adalides del no en Francia, como los gaullistas Philippe Seguin y Charles Pasqua, aclaran estos días, mediante anuncios publicados en diarios europeos, que esta opción no es un rechazo a Europa, sino a la "visión burocrática" de ésta.

La posición británica es vital para Maastricht. Major volvió a reconocer ayer que el triunfo del no en Francia sería "la muerte del tratado" y que éste no se sometería ya a ratificación en la. Cámara de los Comunes.

Pero si gana el sí, tampoco duda de que los diputados lo aprobarían. Los cálculos de Downing Street no dan a los euroescépticos (los conservadores anti-Maastricht) más de 35 votos.

Los líderes sindicales británicos, que representan a más de siete millones de afiliados, también se sumaron al coro de voces favorables al tratado. Según una encuesta publicada ayer por el diario The Guardian, los sindicalistas británicos creen que Europa es una cuestión prioritaria y apoyan una colaboración más estrecha con las instituciones de la CE.

Página 2

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_