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Un desfile presidido por la mujer de Quayle celebra el día de EE UU en la Expo

Elsa Fernández-Santos

Marilyn Quayle, esposa del vicepresidente de Estados Unidos, Dan Quayle, presidió ayer el día de su país en la Expo. Un desfile con aires militares y carnavalescos fue el centro de la jornada. Quayle desfiló a la cabeza junto a Joseph Zappala, embajador de EE UU en España; Frederick Bush, comisario de] pabellón, y dos estrellas de la televisión norteamericana: Tony Randall y Barbara Eden.

"Hacer de la cultura espectáculo es algo genuinamente americano", indicó Emilio Cassinello, comisario general de la Expo, en el discursó que abrió el día nacional de EE UU. "Este es el país de la libertad y de la promesa para inmigrantes, -refugiados y exiliados", continuó antes de darle la palabra a Joseph Zappala, embajador de su país en España, que dijo que hoy todos los caminos en lugar de conducir a Roma conducen a Sevilla. Frederick Bush, comisario del pabellón norteamericano -uno de los más criticados de esta Exposición universal por su poco atractivas actividades- destacó que en el pabellón está "lo mejor de Estados Unidos: la hospitalidad".

Por su parte Marilyn Quayle -traje de chaqueta con los colores de la bandera norteamericana- señaló que para ella era un gran orgullo representar a su gobierno en una exposición que mostraba la nueva cara de España, "un país que ha entrado en un nuevo mundo y que pertenecen a los países líderes de la nueva comunidad mundial", dijo.

Después de los discursos, todos breves, comenzó la actuación de cuatro grupos que pretendían representar a las diferentes etnias del país: bailarines de hoop (indios), cantantes de gospel (negros), músicos country (vaqueros) y una orquesta de ragtime.

Dos estrellas de la televisión norteamericana: el legendario Tony Randall y Barbara Eden -una mezcla entre Zsa Zsa Gabor y Dolly Parton- presentaron los conciertos intentando destacar lo armoniosa que es la vida en un país multirracial como Estados Unidos.

Pero el centro de la jornada fue el desfile que recorrió varias calles de la muestra. Detrás de Marilyn Quayle desfilaron seis soldados de las bases de Rota y Morón, 64 músicos de la universidad de Southerri California, cinco cheer leaders, 50 azafatas del pabellón -cada una con la bandera de un estado en la mano- y un carromato con boyscouts y jugadores de fútbol americano.

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Sobre la firma

Elsa Fernández-Santos
Crítica de cine en EL PAÍS y columnista en ICON y SModa. Durante 25 años fue periodista cultural, especializada en cine, en este periódico. Colaboradora del Archivo Lafuente, para el que ha comisariado exposiciones, y del programa de La2 'Historia de Nuestro Cine'. Escribió un libro-entrevista con Manolo Blahnik y el relato ilustrado ‘La bombilla’

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