Circunloquios bursátiles
A orillas de un mercado central. "Tengo un tenbagger [acción que sube muy rápidamente, según la jerga bursátil]", dice un broker. "¿Realmente es buena?", se oye en un corrillo. "¡Buenísima!", responde el profesional. "Pues compre", remata un inversor.Al otro lado del patio de operaciones. Broker: "Le recomiendo un maravilloso tenbagger. Doblaremos en 24 horas". Inversor: "¿Cómo clasifica esta acción? ¿Es cíclica, de lento rendimiento, de rápido rendimiento?". Broker: "Rapidísima". Inversor: "¿Cuánto han crecído las ganancias este año?". Broker: "Me coge desprevenido". Inversor: "¿Podría decirme la relación precio-ganancia, relativa a los niveles históricos". Broker: "Lo consultaré con el servicio de análisis". Inversor: "¿Qué deudas tiene esta compañía? ¿Se financia con obligaciones? ¿En cuánto se diluyen las ganancias si no hay emisiones? ¿Tiene autocartera? ¿Compran los de dentro?". El intermediario enmudece.
Cabría añadir que el precio de las acciones se mueve con frecuencia en dirección opuesta a los datos fundamentales de las empresas; pero, a la larga, la tendencia del valor y la generación de beneficios de una compañía convergen.
