La muerte de Juanito conmociona al fútbol español

La muerte le llegó entre dos compromisos con el fútbol, la pasión de su vida. Juan Gómez, Juanito, de 37 años, viajaba desde Madrid -había asistido al Madrid-Torino- a Mérida -donde entrenaba al equipo de Segunda-. Dormía en el asiento delantero, junto al conductor. No se enteró de que en la carretera había unos troncos, caídos de un camión que había volcado en el medianil de la autovía N-V; no vio la maniobra que el conductor -Manuel Ángel Giménez, masajista del Mérida- realizó para evitar los troncos, y no Paccionó cuando el coche se estrelló contra un camión portugués. Juanito murió al instante.

El accidente se produjo a las dos de la madrugada del jueves en el kilómetro 161,625 de la N-5, en el término municipal de Calzada de la Oropesa (Toledo). El coche, propiedad de José Fauto Carvajal, presidente del Mérida, quedó destrozado, pero la única víctima fue Juanito. El conductor, Manuel Ángel Giménez, de 28 años, sufrió un hematoma subdural fronto parietal y contusión cerebral, según el parte medico emitido en la tarde de ayer. El alcance de las lesiones requirió una intervención quirúrgica urgente.El cuerpo de Juanito fue trasladado al depósito de cadáveres del cementerio de Talavera de la Reina. Allí, el presidente del Mérida, José Fouto, comentó entristecido: "Mi intención fue acompañar a Juanito en el viaje. Pero a las dos de la tarde del miércoles le dije que no podía por el trabajo. Fue la última vez que hablé con él.... Es una pena...". Fouto no pudo seguir hablando. Al rato indicó que tuvo conocimiento del accidente una hora después, cuando le llamó desde Fuengirola Feni -Fernanda Encinas- la segunda mujer de Juanito. Todos los jugadores del Mérida estuvieron presentes en el cementerio de Talavera y algunos no pudieron evitar las lágrimas.

Sus ex compañeros reaccionaron con gran dolor. José Antonio Camacho, entrenador del Rayo, apenas pudo reaccionar al conocer la noticia: "Es un mazazo. Era como un hermano para mí. Y como futbolista era un genio". "Su muerte es sobrecogedora", dijo Carlos Alonso Santillana. "Era una persona controvertida, pero muy querida", apuntó Manolo Velázquez. "Era un tío entrañable hasta para los rivales", dijo Antonio Maceda.

Apenas tres horas antes de su violenta muerte, Juanito había estado en el vestuario del Bernabéu saludando a sus ex compañeros y a los actuales jugadores del Real Madrid. "Cariñoso como siempre, estuvimos charlando un rato", explicó Del Bosque. "Yo le ví feliz", dijo Jorge Valdano. "Después de una vida un tanto turbulenta, estaba pleno de vitalidad y con muchas ilusiones en su nueva etapa".

El entrenamiento del Real Madrid estuvo presidido por la tristeza. "Cuando te abrazas a una persona y a las ocho horas te dicen que ha muerto, es un palo muy dificil de superar", dijo Miguel Ángel, ex portero del equipo. Gordillo, el último que saludó a Juanito la noche anterior, abandonó el entrenamiento llorando. "Al Gordo dejarle, que está hecho polvo", dijo Miguel Ángel.

Uli Stielike, también compañero en el Madrid, lanzó la idea de organizar un partido de homenaje. "Ha sido una tragedia", apuntó. Para Stielike, Juanito era "un amigo". "Tuvimos un incidente muy fuerte en un partido Neuchatel-Madrid [Juanito le escupió en la cara], pero luego hablamos de ello, un día en la playa, y todo quedó en el olvido".

El presidente del Real Madrid, Ramón Mendoza, y la plantilla se trasladarán esta tarde a Fuengirola para asistir a los funarales.

Oferta del Burgos

La reacción en el mundo del fútbol fue unánime. Antonio Martínez Laredo, el presidente del Burgos, equipo en el que Juanito jugó antes del Real Madrid, descubrió que el martes iba a mantener una reunión: "Era el primero en nuestra lista de entrenadores para la próxima temporada".

"Me enteré de la noticia en un taxi y no me la podía creer", dijo Ladislao Kubala, entrenador de Juanito en la selección española. Johan Cruyff, entrenador del Barcelona, dijo: "Tenía todo lo que necesita un buen futbolista: calidad y genio. Fue un jugador' que marcó una época".

El cadáver fue trasladado por la tarde a Mérida, donde se reunieron miles de personas para recibir los restos mortales. se celebró un homenaje, para viajar después hacia su localidad natal, Fuengirola (Málaga), donde hoy se celebrará el entierro a las 18.00 horas. En Fuengirola, las banderas de los edificios municipales fueron colocadas a media asta.