Un camarero muere después de recibir un tiro en la cabeza
EL PAÍS Francisco Manzano Criado, camarero de 64 años, falleció en la madrugada de ayer después de recibir un disparo en la cabeza, según informaron fuentes de la Jefatura Superior de Policía.
Manzano era camarero en el bar Agumar, situado en el número 16 de la avenida del Mediterráneo (distrito de Retiro). A las ocho de la mañana de ayer, una clienta que pasaba por delante del bar descubrió el cadáver. La mujer observó extrañada que el bar tenía sus puertas abiertas y las luces encendidas, ya que ayer era el día de descanso semanal. Una vez dentro del bar, encontró el cadáver en los aseos.
La brigada de homicidios del Cuerpo Nacional de Policía investiga las circunstancias de la muerte del camarero, que supuestamente fue agredido hacia la medianoche. La recaudación del día no estaba ayer en la caja registradora del bar.
Un familiar de Manzano Criado comentó anoche que éste llevaba "muchísimos años, unos 15" trabajando en el mismo bar donde ayer fue disparado. También dio a conocer que la víctima estaba casada y tenía cinco hijos. El propietario de otro bar próximo a aquel en que ocurrió el suceso confirmó que Manzano Criado llevaba trabajando en el establecimiento desde que éste fue abierto.
