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La dimisión del presidente del Metro agrava la crisis en el transporte público

Javier Casqueiro

JAVIER CASQUEIRO El presidente del Metro, Guillermo Vázquez, presentó ayer su dimisión. Vázquez adujo, además de razones personales, un "profundo desacuerdo" con la política que el Ayuntamiento de Madrid está marcando en la gestión y financiación del transporte público. El Ayuntamiento ha recortado para este año su aportación a estos servicios en más de 6.000 millones, lo que ha desatado una crisis política en el organismo que regula el funcionamiento del metro y los autobuses. El recorte municipal supone anular las inversiones previstas en 1992 y, además, subir las tarifas un 10%.

Guillermo Vázquez acudió ayer al Consejo de Administración del Metro para presentar el balance económico de 1991, que concluyó con un superávit de 433 millones de pesetas. Vázquez no se quedó hasta el final de la reunión, anunció a los consejeros su dimisión y se presentó inmediatamente en una conferencia de prensa.Todas las fuentes consultadas resumen en tres las razones de Vázquez para marcharse en estos momentos: malas relaciones con el Partido Popular, indignación contra los sindicatos por fomentar con "acusaciones falsas" la sensación de inseguridad en el Metro y desacuerdo con el Ayuntamiento sobre la financiación de los transportes.

Reflexión sobre el sistema

La postura del Ayuntamiento de reducir su aportación al Consorcio Regional de Transportes "es una decisión con la que, aunque respeto, estoy en profundo desacuerdo por dañar gravemente al sistema de transportes, y como quiera que no coincido con las decisiones del alcalde, que es quien debe proponer al presidente del Metro, lo honesto y razonable es irme, lo que espero sirva de aldabonazo para que se reflexione sobre el futuro del sistema", dijo Vázquez.

En el Ayuntamiento no esperaban esta situación. Vázquez aseguró, incluso, que el concejal de Circulación, José Antonio García Alarilla, le ha pedido que permaneciese en el cargo. El hasta ayer presidente del Metro, de 46 años, ingeniero de caminos, un teórico del tráfico y los transportes, fue nombrado para este puesto hace cuatro años, cuando era alcalde el socialista Juan Barranco.

Eduardo Larraz, ex concejal de Circulación y militante del CDS, se apunta como sucesor de Vázquez.

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Vázquez ha aclarado que no soportaba por más tiempo los ataques que se le realizaban desde el Partido Popular, especialmente sus diputados autonómicos. Un parlamentario del PP, Ismael Bardisa, pidió su dimisión tras criticar que Vázquez se había gastado 58 millones en remodelar su despacho.

Un portavoz del Metro indicó ayer que esta inversión se había consignado para rehabilitar un edificio, La Casa de los Gatos, para albergar a las 14 personas que se ocupan del servicio de información y de relaciones públicas, así como despachos y salas para reuniones.

Los sindicatos, sin embargo, se pronuncian en esta línea: "¿Si no había dinero para habilitar esta casa como guardería para nuestros niños, cómo lo hay para convertirla en despachos?", se preguntan.

Los sindicatos, en general, califican el periodo de Vázquez de calamitoso, sobre todo en cuanto a recursos humanos. La CNT precisó: "Le cabe el triste récord de haber sido el presidente que ha destruido más puestos de trabajo, unos 800, y ha dejado la plantilla en menos de 6.000 personas".

El sindicato de conductores recordó la falta de seguridad como uno de los problemas más graves. Vázquez ha explicado a sus colaboradores que no entiende cómo los sindicatos se dedican a degradar, con denuncias que considera inciertas, a la propia compañía.

Los trabajadores del Metro ratificaron ayer una plataforma de reivindicaciones que hoy pensaban negociar para el nuevo convenio: subida lineal de 20.000 pesetas, creación de empleo y reducción de jornada a 35 horas semanales.

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Sobre la firma

Javier Casqueiro
Es corresponsal político de EL PAÍS, donde lleva más de 30 años especializado en este tipo de información con distintas responsabilidades. Fue corresponsal diplomático, vivió en Washington y Rabat, se encargó del área Nacional en Cuatro y CNN+. Y en la prehistoria trabajó seis años en La Voz de Galicia. Colabora en tertulias de radio y televisión.

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