Incidentes aislados empañan un precario alto el fuego en Croacia
Algunos incidentes aislados, denunciados por serbios y croatas, ensombrecieron ayer la esperanza que en la madrugada anterior había suscitado la entrada en vigor del alto el fuego incondicional decretado por la presidencia colectiva de Yugoslavia. El más importante fue el bombardeo con más de 100 granadas de mortero contra la localidad de Topusko, denunciado por las autoridades de Zagreb. Sin embargo, hasta bien entrada la noche no se habían producido choques directos.
"De continuar estas acciones, las fuerzas croatas se verán obligadas a defenderse", declaró el viceministro del Interior croata, Milan Brezak, mientras combatientes serbios de Kosteljnica aseguraban que el enemigo no respetaba el alto el fuego y que ellos tampoco lo harían.La comisión estatal encargada de supervisar el cumplimiento del alto el fuego esperaba ayer que transcurriera la noche, dado que hasta ahora la mayoría de los enfrentamientos más violentos desde que comenzara la crisis yugoslava se produjeron durante la madrugada.
Entretanto, la República de Macedonia echaba más leña al fuego al decidir su Parlamento convocar para el 8 de septiembre un referéndum para decidir si, como ya hicieron Croacia y Eslovenia, proclama su independencia.
Precisamente en esta última república, el ministro de Defensa, Janez Jansa, denunció ayer la existencia de un documento secreto del Ejército federal que prevé lanzar una operación de reconquista para finales de septiembre, una vez que haya sido aplastada la resistencia en Croacia.
Mientras, la Unión Europea Occidental se reunía en Londres sin llegar a otro resultado que el reconocimiento de su incapacidad para acordar medidas concretas que hagan que se cumpla el alto el fuego. El organismo defensivo europeo mantendrá nuevas reuniones de "seguimiento" este mes. Página 3
