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BALANCE DEL PRESUPUESTO DE 1990

La regularización fiscal se limitará a permitir este año declaraciones complementarias sin intereses

P. M.El ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, avanzó ayer que la regularización fiscal se Iimitará a la posibilidad de realizar declaraciones complementarias sin intereses de demora y con facilidades para pagar la deuda tributarla tras la reforma de la ley de renta y durante un periodo muy limitado de tiempo. La regularización se complementará con la desaparición de los pagarés del Tesoro, que podrán voluntariamente canjearse por un activo de similar rentabilidad, pero que mantendrá cautiva la inversión durante los cinco años de vida antes de la amortización.

Esta vía elimina la posibilidad de una amnistía parcial de afloración de dinero negro con un pago limitado del 20'/o o el 30%, tal Y como habían propuesto algunos sectores.

Solchaga explicó las grandes líneas que seguirá la regularización, fiscal durante una conferencia de prensa destinada a evaluar el cierre del presupuesto y de la situación general de la economía en 1990. El balance económico y presupuestario de 1990 es, a juicio (le Solchaga, positivo, a pesar del aumento del déficit.

El responsable de Economía destinó los mayores elogios a los resultados de la política de enfriamiento, que ha conseguido mantener un apreciable crecimiento económico (el producto interior bruto aumentó un 3,5% en 1990) tras la fuerte contención de la demanda interna (que creció un 4,3% el año pasado, frente al 7,8%) de 1989).

Solchaga no quiso, como en años anteriores, adentrarse en las previsiones para este ejercicio, pues considera que éstas depender, de cuál sea la evolución de le. guerra del Golfo, Sí adelantó que su departamento considera conveniente la caída de los tipos de interés, pero que este anunciado recorte de intereses depende de la evolución de la inflación en España y de los tipos de interés en otros países.

No hay amnistía fiscal

La principal novedad que adelantó ayer Solchaga con vistas a este año fue el avance de cómo puede realizarse ya la regularización fiscal. "Estarnos de acuerdo con todos los grupos parlamentarios con los que hemos discutido la reforma fiscal en que no es posible una amnistía", aseguró Solchaga. En su opinión, "no es posible, ni política, ni jurídica, ni constitucionalmente, que paguen menos los que no han pagado hasta ahora".

Como solución, dijo, "vamos a facilitar las declaraciones complementarIas durante un periodo transitorio". La idea es que los contribuyentes que tengan deudas pendientes con Hacienda podrán regularizar su situación con el fisco tras la aprobación de la ley de renta, y hasta final de año, por la vía -ya existente- de las declaraciones complementarias.

La novedad es que las complementarias que se presenten antes del 31 de diciembre estarán exentas de los intereses de demora y tendrán facilidades de pago de la deuda tributarla. A cambio, el próximo ano desaparecerá esta vía de arrepentimiento súbito y sin sanción; es decir, "no habrá complementarlas a la carta".

La regularización tendrá un segundo apoyo en los pagarés del Tesoro, un activo que ha colaborado a la financiación del déficit público, pero que ya nadie defiende. El titular de Economía reiteró ayer que "la opacidad de los pagarés del Tesoro está garantizada por la ley de activos financieros". Ahora de lo que se trata es de dar una salida a sus tenedores que anime a la afloración de patrimonios.La desaparicion de los pagares, como la ampliación de las complementarias, se arbitrará en una disposición adicional o transitoria de la nueva ley de renta. La idea es que los inversores que tengan pagarés podrán transformarlos por otro activo, de emisión única, con un plazo de amortización de cinco anos y que no serán negociables en el mercado secundario. Tras los cinco años, el dinero negro invertido en este activo transitorio estará regularizado porque las deudas con Hacienda prescriben en ese plazo.

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