Mario Conde pide al Gobierno un cambio de política económica
El presidente de Banesto y de la primera corporación industrial de España, Mario Conde, planteó ayer la necesidad de que el Gobierno cambie la política económica seguida en los últimos años, que, a su juicio, es la causante de los desequilibrios estructurales existentes actualmente. "Si seguimos manteniendo la misma política", afirmó Conde, "lo único que haremos es agravar la recesión que pueda afectar a la economía"."No me parece admisible decir que la crisis del Golfo obliga a la economía española a un ajusteduro", señaló el presidente de Banesto en su discurso de clausura de la 231 Reunión Bancaria Internacional, que a lo largo de cinco días ha congregado en Estepona (Málaga) a más de un centenar de banqueros españoles y extranjeros.
A juicio de Conde, los desequilibrios existentes van a intensificarse como consecuencia de la crisis energética. Conde añadió que en la elaboración del Plan Energético Nacional se debería tornar en consideración, de una manera clara, que una política de energía nuclear es absolutamente imprescindible en España para reducir nuestra dependencia del petróleo como fuente de energía.
Para Mario Conde es un enfoque acertado del Gobierno plantear la aplicación combinada de las políticas monetarias y fiscal, "lo que ocurre es que la experiencia nos demuestra que, al final, ha sido la política monetaria la que ha tenido que soportar el peso de conducir la economía española". La política monetaria, según el presidente de Banesto, debe abordarse de forma enérgica y con toda claridad, ya que, de otra manera, "nuestra posición de desventaja relativa respecto de otras economías occidentales, caso de perseverar en la misma política, se intensificaría".
El presidente de Banesto criticó la fortaleza "artificial" de la peseta y dijo que dentro del Sistema Monetario Europeo existe margen para situar a la peseta en niveles más acordes con la realidad económica del país.
Dentro de su análisis sobre la política monetaria, Conde incidió en la conveniencia de considerar el restablecimiento de límites al crecimiento del crédito, porque, a su juicio, esos límites están afectando más a la inversión que al consumo.
