_
_
_
_
_
GENTE

Fanny Ardant

La actriz vuelve al teatro con una obra de Pirandello

A punto de cumplir 40 años, la actriz Fanny Ardant representa para los franceses el matrimonio ejemplar de la elegancia y la pasión. Ahora, la última compañera sentimental de fallecido director de cine François Truffaut, la protagonista de sus dos últimas películas, La femme da coté y Vivement dimanche, ha vuelto al teatro tras una larga ausencia. En una sala parisiense, Ardant representa el papel de la Desconocida de la obra Como tú me quieres, de Pirandello. Un papel, dice la crítica francesa, hecho a la medida de su desmesura.Desde que en enero comenzó en un teatro de Lyón su interpretación de la Desconocida, Fanny Ardant ha decidido dejar de fumar, aunque, precisa, "no para siempre". "Sentía", afirma la actriz, "que el tabaco me quitaba fuerzas para este personaje concreto. Pero no me gusta decir 'nunca más' en ningún aspecto de la existencia. Así que es probable que vuelva a fumar cuando termine este trabajo".

Ese rechazo a las decisiones definitivas es esencial en la personalidad de Ardant. La actriz quiere dejar siempre puertas abiertas. Por ejemplo, en materia de hijos. Ardant tiene tres hijas de edades comprendidas entre los 18 meses y los 14 años, una de ellas nacida de su unión con François Truffaut. La actriz explica: "Nunca he aceptado que hay que escoger entre el deseo de maternidad y la carrera profesional. Los hijos son una de las cosas de la vida que no deben ser programadas. Son un regalo".

Ardant se define como una vagabunda enamorada de los viajes, los juegos, el ruido del viento en los árboles y la lectura. "A mis hijas les digo: leed y os salvaréis del abandono. Llegaréis a ser la princesa de Clevesá". Cuando murió Truffaut, un domingo de octubre de 1984, víctima de un derrame cerebral, Fanny Ardant se encontraba a su lado en el hospital Americano de Neuilly, en las cercanías de París. La primavera siguiente participó emocionada en un homenaje póstumo que rindieron los actores al director francés en Cannes.

Tras haber rodado con François Truffaut, Alain Resnais, Jeremy Irons y otros grandes directores de cine contemporáneos, Ardant está redescubriendo el arte de comedianta que estudió y practicó en su primera juventud, cuando abandonó sus estudios de ciencias políticas. "En el cine", explica la actriz, "el actor pertenece a un equipo donde todo cuenta. Maquillaje, accesorios, sonido, cámara, electricidad, todo tiene la misma importancia. En el teatro, aunque haya un trabajo de equipo previo, el actor está solo, completamente solo. Ésa es la gran diferencia".

En la pieza de Pirandello, Ardant es una hermosa mujer amnésica, una criatura patética y desvergonzada que baila hasta el vértigo en los cabarés del Berlín de los años veinte. El crítico de Le Nouvel Observateur la ha visto como "una llama negra". Es una definición perfecta.

Del autor de Como tú me quieres, que no había leído hasta ahora, Ardant retiene la idea de que los personajes de Pirandello "no pueden cerrar los ojos, nunca pueden reposar". Está convencida de que la tragedia de esos personajes reside en que "son demasiado lúcidos".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_