Muere un policía en Bilbao al estallar un artefacto
El miembro del Cuerpo Nacional de Policía Ignacio Pérez Alvarez, de 39 años de edad, resultó muerto a las 14.55 de ayer al estallar un artefacto colocado en la parte de atrás de una bicicleta, en la calle de Bizkaia, en la localidad vizcaína de Galdakao, según explicaron fuentes del Gobierno Civil. Un testigo presencial de los hechos dijo que el agente salía de tomar unos vinos en el bar Los Claveles, al que solía acudir diariamente. Cuando se disponía a abrir la puerta de su vehículo, un Seat 124 granate con la matrícula BI-2576-I, hizo explosión la bicicleta bomba, que le alcanzó de lleno.
Otra testigo de los hechos señaló que momentos antes del atentado había visto a un joven, de unos 28 años, colocar la bicicleta bomba junto al bar Los Claveles. La explosión produjo un boquete en la pared.Poco después de producirse el atentado, la juez de guardia de Galdakao autorizó el levantamiento del cadáver, que se encontraba destrozado, según confirmó un agente de la Policía Municipal.
Los miembros del equipo de desactivación de explosivos del Cuerpo Nacional de Policía (Edex) señalaron que el artefacto contenía abundante carga explosiva y una gran cantidad de metralla. La onda expansiva afectó a los inmuebles de los alrededores y sembró la calle de cristales, así como de restos de las fachadas colindantes.
Nada más producirse el atentado terrorista, funcionarios de la Ertzaintza (policía autónoma) y de la Policía Municipal acordonaron la zona para evitar que los cristales que se desprendían pudieran alcanzar a alguno de los curiosos que se arremolinaron en el lugar de los hechos.
Ignacio Pérez Álvarez, natural de Villagatón (León), casado y con tres hijos, es la primera víctima del terrorismo en lo que va de año. Fuentes del Gobierno Civil confirmaron que había sido destinado al País Vasco en 1979 y que en la actualidad formaba parte de la sección de automoción del cuartel de Basauri, en calidad de funcionario de la Escala Básica.
José Ramón Rekalde, consejero de Educación del Gobierno vasco, manifestó ayer que "si se confirma que ETA es la autora del atentado las vías de diálogo están claramente cerradas".
Por su parte, Eusko Alkartasuna, a la vez que repudió este nuevo acto de violencia, instó a ETA a abandonar definitivamente las armas. "Cada muerte, fruto de la violencia irracional de quienes desprecian la voluntad absolutamente mayoritaria de nuestro pueblo, supone un nuevo obstáculo en el camino hacia una Euskadi en la que el progreso social, económico y cultural sean la garantía de nuestra libertad".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.