Un falso inspector municipal imponía y cobraba multas a bares por presuntas infracciones
Alejandro Torralba Ramos, que se hacía pasar por inspector municipal de Sanidad, fue detenido por funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía acusado de estafar a 13 bares. El detenido, tras hacer una revisión de los establecimientos, imponía a sus dueños multas de entre 6.000 y 15.000 pesetas por presuntas infracciones.
Los propietarios de los bares del distrito de Fuencarral se debieron preguntar el pasado viernes a qué venía la masiva campaña de inspecciones de la concejalía de Sanidad del Ayuntamiento de Madrid. Alejandro Torralba Ramos, de 31 años, un falso inspector municipal, visitó la víspera de la festividad de los Reyes Magos hasta ocho bares del barrio del Pilar, a los que impuso diversas multas por varias anomalías.Muy pocos encargados sospecharon que se trataba de una estafa. Torralba había trabajado durante seis meses, los primeros de 1988, en una empresa de recaudación ejecutiva del Ayuntamiento de Madrid y conocía a la perfección la mecánica de su trabajo.
A las siete de la tarde del viernes, Torralba decidió terminar su jornada en un bar de la calle de Sarriá, en el barrio del Pilar. Allí manifestó que era inspector de Sanidad del Ayuntamiento. El carné que enseñó no levantó las sospechas de la encargada y empezó a solicitar papeles. Pidió la licencia de apertura, la lista de precios, el libro de inspección, el carne de manipulador de alimentos, etcétera. Torralba examinó todos los documentos, comunicó que había varas irregularidades y cumplimentó un impreso, que extrajo de un portafolios, donde dejó constancia de una multa de 15.600 pesetas, tasas incluidas. Además, agregó que si no se pagaba en el acto, la sanción subiría a 100.000 pesetas.
Fue un cliente del establecimiento el que no picó. Salió del bar y comunicó lo ocurrido a una patrulla del Cuerpo Nacional de Policía que llegó al establecimiento cuando la encargada acababa de abonar la sanción. Torralba se identificó a los agentes como recaudador municipal y les enseñó el carné. Pero esta vez no salió bien. Los funcionarios de la comisaría de Fuencarral comprobaron, ya en comisaría, que se trataba de un estafador con antecedentes por el mismo motivo. Posteriormente localizaron a 12 perjudicados más. Ocho de ellos presentaron impresos con sanciones de entre 6.000 y 15.000 pesetas. Sólo cuatro declararon no haber pagado al sospechar de que se trataba de una estafa. Al detenido se le ocuparon libros de inspección y de visita con anagramas de organismos oficiales.
