_
_
_
_
_

Cinco muertos al estrellarse contra un mereancías un Talgo que circulaba por una vía que no tenía que utilizar

Cinco personas fallecieron y otras 59 resultaron heridas -de las que 44 tuvieron que recibir asistencia hospitalaria- al chocar el Talgo Madrid-Gijón con un mercancías en la estación de Arévalo (Avila). El accidente se produjo a las 11.53, cuando el Talgo, en el que viajaban 118 personas, se estrelló a 110 kilómetros por hora contra un mercancías que estaba parado. Fuentes de Renfe han reconocido que el tren de viajeros, que habitualmente no para en Arévalo, entró en la estación por una vía que no tenía que haber utilizado.

Más información
Relación de heridos

El Talgo pendular 131, con 112 viajeros y seis empleados de Renfe, entró en la estación por la vía número 3 cuando debía haber utilizado la número 1, según las citadas fuentes. En la vía 3 se encontraba parado el mercancías que transportaba plataformas de automóviles vacías. Este tren se había detenido allí 25 minutos antes para esperar que pasase el Talgo, al que debía dar paso. Ambos ferrocarriles circulaban en dirección a Valladolid.La máquina del Talgo, que arrastraba a once vagones, chocó con la cola del mercancías a unos 100 metros de la terminal de viajeros de la estación. A causa del impacto, la máquina del Talgo volcó y quedó cruzada en el andén central, a uno 25 metros del resto de los vagones. Los edificios de la estación también resultaron dañados, tres vagones del Talgo se salieron de la vía y uno del mercancías quedó a pocos metros de la terminal de viajeros.

Cuatro personas fallecieron en el acto a causa del siniestro: el ayudante de maquinista Francisco Vela Montealegre, la ciudadana de la República Popular China Cristina Fu Kuomei, y un hombre y una mujer de unos 30 años cuyas identidades se desconocían anoche. La quinta víctima mortal es Aurora Vega Puebla, una mujer de avanzada edad que falleció tras ser ingresada en la residencia Nuestra Señora de Sonsoles, de Ávila.

El juez de instrucción de Arévalo ha ordenado iniciar los trámites para identificar a los,fallecidos que no llevaban documentos personales. Los cadáveres quedaron depositados en el Tanatorio de Ávila.

Los edificios de la estación recibieron el impacto de piezas, muelles y otros trozos metálicos de la máquina y de los primeros vagones del Talgo. La máquina arrasó el mobiliario urbano de la estación. A las vías cayeron objetos personales de los viajeros y la casa de un obrero ferroviario quedó dañada por un poste del tendido eléctrico que arrastró la máquina del pendular. El tráfico ferroviario fue restablecido a media tarde, aunque sólo para trenes con máquinas diesel.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Fuentes de la Guardia Civil señalaron que el siniestro podría haber sido más grave si la máquina se hubiese precipitado contra el edificio de viajeros.

En el rescate de los heridos participaron efectivos de la Guardia Civil, ambulancias de Arévalo y de Medina del Campo, Cruz Roja de Ávila y Segovia, ciudadanos y policía municipal de Arévalo y bomberos de Ávila y Madrid.

"Frívolo y aventurado"

Alberto García, director de la primera zona de Renfe, afirmó ayer que resulta "frívolo y aventurado" dar una explicación inmediata de las causas del accidente, que atribuyó a una posible suma de circunstancias, ya que se utilizan sistemas de seguridad superpuestos. El cambio de agujas, según Renfe, lo efectúa un funcionario con un mando a distancia desde uno de los edificios de la estación.

Miembros de la Inspección General de Renfe llegaron a la estación de Arévalo a primera hora de la tarde para comenzar las investigaciones sobre el origen del siniestro. Entre otros aspectos, la investigación se centrará en la comprobación de los mensajes entre los jefes de estación, la registradora de velocidad del Talgo, el reconocimiento de los vehículos y la declaración de los empleados del tren de pasajeros. Según Alberto García, las primeras conclusiones sobre el suceso se podrán establecer dentro de una o dos semanas.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_