Los 3.000 millones del segundo premio, muy repartidos en Sevilla
El segundo premio de la lotería del Niño, correspondiente al número 14.675, fue vendido íntegramente por la administración número 16 de Sevilla, conocida como Sagasta por estar situada en la calle del mismo nombre. El premio, que ha quedado muy repartido, fue distribuido en su mayor parte por la vendedora ambulante María Villegas, a la que llaman María la Pesá por las muchas horas que permanece en una esquina cercana a la administración. La vendedora, el encargado y la propietaria y empleada de dos comercios cercanos resultaron agraciados con ocho millones de pesetas.
Nada más conocerse el número premiado, la administración de loterías número 16 de Sevilla, una de las más antiguas de la ciudad, se llenó de curiosos y afortunados. En total, el sorteo del Niño ha beneficiado a Sevilla con 3.000 millones de pesetas, según señaló el propietario de la administración, José Enrique Jiménez.Las 22 series del número agraciado fueron repartidas en décimos por ventanilla y a una vendedora ambulante que lleva distribuyendo el mismo número varios años. La vendedora, conocida como María la Pesá, resultó premiada con ocho millones de pesetas, al igual que el encargado de la administración, Diego Montero, que trabaja en la oficina de la calle de Sagasta desde hace 40Úños y también está abonado al número.
La propietaria de una tienda de flores, Carmen Antúnez, y una empleada de un comercio de artículos de cerámica, llamada Esperanza, situados a izquierda y derecha de la administración, recibirán también ocho millones de pesetas. Dos jubilados, Domingo Cueva de la Rosa, que trabajaba anteriormente en un banco cercano, y Rafael González Oliva, portero de una vivienda del barrio de los Remedios, fueron otros de los agraciados con ocho millones de pesetas.
La titular de la administración es Isabel Porto. Hace 12 años este mismo despacho repartió íntegramente el primer premio del sorteo del Niño.
Los cuatro agraciados con el premio de 250 millones de pesetas a los décimos especiales no han sido identificados, aunque, según el encargado, minutos después de cantarse el número un cliente telefoneó para decir que Ie habían tocado 150 millones de pesetas.
