El Oporto ganó la Copa de Europa con un gol de tacón

El Oporto se proclamó anoche campeón de Europa por primera vez en su historia tras vencer al Bayern de Múnich, por 2-1, en la final disputada en Viena.El favoritismo del equipo alemán que dirige el ex-técnico azulgrana Udo Latteck se derrumbó en sólo tres minutos, el tiempo justo que tardaron los portugueses en remontar el marcador tras igualarlo el argelino Madjer con un espectacular taconazo. El Bayern, tricampeón de la Copa de Europa, controló sin apuros el primer tiempo del partido, pero en la segunda mitad fue netamente superado por el Oporto, ante el delirio de los 20.000 portugueses presentes en el Prater.

Las bajas con que uno y otro equipo (Augenthaler, Dorfner y Wolilfarth, por parte alemana, y Lima Pereira y Gómes por el lado portugués) afrontaban el partido parecía que iban a perjudicar más al Oporto que al Bayern, porque tal y como transcurrieron los primeros 45 minutos dio la impresión de que Artur Jorge no disponía de un delantero capaz de marcar. Con sólo Futre en punta, de nada sirvió el juego técnico, con apoyos en corto, de los cinco centrocampistas portugueses para frenar la ofensiva alemana. El Bayern dispuso de tres claras ocasiones de gol por ninguna de su rival.

La reacción del Oporto llegaría en la segunda parte. Los portugueses se estiraron en el campo, consiguieron adormecer a un rival demasiado confiado, y cuando tuvieron controlado el encuentro dieron el zarpazo. Futre, con una jugada excepcional al estilo Maradona, en la que sentó a Nachtweih, Eder y Pflueger, dio el primer aviso (m. 20). Su remate cruzado mereció el gol, pero el argelino Madjer no llegó a remachar. Madjer se tomaría la revancha 12 minutos después. Primero, cuando, de espaldas a la portería, taconeó a la red un centro raso y forzado de Juary, y consiguió el empate. Y después cuando dejó sentados a Winklhofer y Nachtweith y le dio el gol del triunfo a Juary. Fueron tres minutos de éxtasis que valieron un título en un partido de alto nivel técnico pero faltado de ritmo de juego.