Pinochet envía una protesta al Vaticano en vísperas de la visita del Papa a Chile
El Gobierno del general Augusto Pinochet envió en la madrugada de ayer una nota de protesta al Vaticano por unas declaraciories realizadas la semana pasada por el obispo de Linares, Carlos Camus, de tendencia progresista. Camus afirmó en una entrevista periodística, que los autores del atentado del pasado mes de septiembre contra Pinochet demostraron cierto "'heroísmo", y acusó al régimen de "inmoralidad".
El obispo de Linares posteriormente rectificó en parte sus afirmaciones al manifestarse en contra de toda forma de terronsmo. A estas matizaciones se sumó también el presidente de la Conferencia Episcopal Chilena, Bernardino Piñera.Pero, en su protesta al Vaticano, el régimen de Pinochet señala que no está suficientemente satisfecho con las esplicaciones del clero chileno. No obstante, cuando sólo faltan dos semanas para que comience la visita de Juan Pablo II a Chile, el Gobierno señala su voluntad de dar por cerrado uno de los capítulos más tensos de sus relaciones con la Iglesia católica y de no seguir polemizando sobre el tema.
Según fuentes oficiosas, sólo la proximidad de la visita papal ha impedido que el régimen chileno tome medidas más severas en torno a este caso. Una nueva polémica enfrenta ahora a las autoridades, que presentan al Papa como un "mensajero de la paz", con el movimiento cristiano, que destaca su papel de defensor de los derechos humanos.
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