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Industria y eléctricas firmaron anoche el nuevo plan de saneamiento

El ministro de Industria, Joan Majó, y los presidentes de ocho empresas eléctricas firmaron anoche el Acuerdo sobre programa de actuación a medio plazo del sector eléctrico, desbloqueando de esta forma las conversaciones entre ambas partes tendentes a sentar las bases de un saneamiento del sector a medio plazo. El documento firmado cierra la primera fase de ese plan de saneamiento, la concerniente a sus aspectos cualitativos, y deja abierta la puerta a las negociaciones cuantitativas del plan, que se iniciarán previsiblemente en la próxima semana.

Este acuerdo va a permitir, por otra parte, que se pueda aprobar el incremento en las tarifas eléctricas. Todo parece indicar que el compromiso de la Administración de aumentar las tarifas eléctricas en un 8,1% se va a respetar, según fuentes de Industria. Sin embargo, ayer se supo que la mayoría del pleno de la Junta Superior de Precios se ha mostrado partidaria de recortar la subida de las tarifas en cuatro puntos, lo que representa una rebaja de 40.000 millones de pesetas sobre la propuesta del Ministerio de Industria.

Joan Majó afirmó anoche, en el acto protocolario de la firma del acuerdo con las empresas eléctricas, que estaba "satisfecho" porque se habían cumplido los plazos y objetivos previstos para ésta primera fase. El ministro de Industria añadió que "estamos en la línea de una actuación decidida y realista ante las exigencia! de saneamiento del sector, lo que además nos va a permitir eliminar las incertidumbres de los productores y usuarios en los próximos años".

Equilibrio financiero

Majó recordó también a los presidentes de las eléctricas que el objetivo final que se perseguía con este acuerdo era lograr un reequilibrio financiero del sector, así como conseguir que "todas nuestras empresas industriales puedan tener energía competitiva en costes y servicios en relación con sus homónimas europeas". Juan Alegre Marcet, presidente de la patronal del sector (Unesa), que aseguró que las empresas eléctricas estaban trabajando en esa línea, afirmó que el acuerdo, al que calificó de bueno para la Administración y las compañías, suponía "un acto de confianza del sector en el Gobierno, dado el grado de posibilidades de desarrollo que tiene el documento firmado".El acuerdo entre las empresas, previo a la firma, se consiguió a media tarde de ayer, después de que la reunión mantenida a lo largo de la mañana entre Joan Majó, Juan Alegre Marcet y Manuel Gómez de Pablos, presidente de Iberduero, concluyera aparentemente sin resultado positivo.

La reunión matinal a tres pretendía solucionar las discrepancias existentes en torno a las amortizaciones de las centrales nucleares afectadas por la moratoria nuclear y la constitución de un fondo, con cargo al incremento de las tarifas, destinado al cumplimiento por parte de las empresas de sus compromisos contables y financieros.

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