La Asamblea de Madrid rechaza la reprobación de tres consejeros propuesta por el Grupo Popular
La Asamblea de Madrid aprobó sólo seis de las 15 propuestas de resolución presentadas al término del debate sobre el estado de la región, las cuatro socialistas y dos de las ofrecidas por el Grupo Comunista. Entre las propuestas del Grupo Popular rechazadas figuran la reprobación del consejero de Ordenación del Territorio, Eduardo Mangada; del de Trabajo, Agapito Ramos, y del de Obras Públicas, César Cimadevilla, y la supresión de las consejerías de Gobernación y Educación.
Las propuestas aprobadas se refieren a la satisfacción de la Cámara por la consolidación de la Comunidad, la necesidad de una profundización en el diálogo con las instituciones, la fijación de un sistema definitivo de financiación de la Comunidad y la necesidad de ampliar la actividad inversora de la misma. Las dos resoluciones del Grupo Comunista que contaron con el apoyo socialista se refieren a la elaboración por el Gobierno regional de dos informes, uno sobre los efectos económicos y sociales que tendrá para Madrid el ingreso de España en el Mercado Común y otro sobre el estado de los programas de residuos sólidos urbanos e Industriales.También fueron rechazadas propuestas del Grupo Mixto (integrado por diputados del PCE) y del comunista (carrillistas) para que se recaben al Gobierno Central las transferencias en materia de Educación, Sanidad, Trabajo y Seguridad Social. Tampoco fueron aprobadas las creaciones de un plan económico regional, de un plan de lucha contra el paro y de un consejo económico y social.
La mesa de la Asamblea rechazó la discusión, por no considerarla del ámbito de competencias de la Comunidad, de una propuesta presentada por el Grupo Comunista en la que pedía al Gobierno regional que recabara información al Gobierno Central sobre el estado de las negociaciones para reducir la presencia militar norteamericana en la base de Torrejón de Ardoz. El Grupo Comunista pedía también que la Asamblea de Madrid se pronunciara sobre el desmantelamiento de esta instalación militar.
El debate se había reanudado por la mañana con la intervención del portavoz del Grupo Popular, José López López, que presentó un adelanto de lo que serán presumiblemente algunas bases del programa de gobierno de su grupo para las elecciones autonómicas de 1987. Leguina le acusó de proponer la "vuelta al pasado".
En su alternativa, la oposición conservadora pide que se negocie con el Gobierno central para acelerar la construcción de autovías a Burgos, Zaragoza y al sur de España, la potenciación del servicio de cercanías de Renfe, medidas para reducir el paro y aumento del presupuesto para Bienestar Social. Otras propuestas del portavoz conservador fueron crear cuerpos de policía local y bomberos en las poblaciones de más 20.000 habitantes.
López criticó el proyecto de recargo del 3% -"que será la tumba política de Leguina"-, y el proyecto de creación del tercer canal de televisión -aparentemente congelado-, "un intento faraónico".
