La OPEP estudia reducir la diferencia de precio entre crudos pesados y ligeros
Los 13 miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), que iniciaron ayer en Ginebra su 74ª reunión ordinaria, decidieron estudiar un nuevo reajuste del diferencial de precios que existe entre los crudos pesados, de peor calidad, y los denominados ligeros, con objeto de que esta diferencia se acorte más. Este punto, que no estaba inicialmente incluido en ninguno de los 14 apartados de que consta la agenda de esta reunión, logró ser introducido, como anexo al número 13, por el ministro del Petróleo de Arabia Saudí, jeque Ahmed Zaki Yamani.
Los países de la OPEP han acordado asimismo reunirse antes del próximo mes de octubre para abordar otro de los aspectos calientes que actualmente divide a la organización, como es el de la revisión -previsiblemente al alza- de las cuotas de producción. La reunión que se inició ayer, tan sólo dos semanas después de la que se celebró a nivel consultivo en Viena, comenzó con un ambiente de palpable diferencia de criterios, que influyó decisivamente en que en poco tiempo quedaran alteradas sustancialmente las previsiones realizadas en su discurso inaugural por el ministro indonesio del petróleo, doctor Subroto, que volvió a ser reelegido presidente de la reunión.Éste había señalado en sus palabras, en las que hizo una llamada a la unidad de acción entre países miembros y no miembros de la organización, que "no estamos aquí con el propósito expreso de recortar los precios o reducir la producción, sino para tomar medidas que permitan volver a controlar el mercado". "Una caída en los precios podría ocasionar una crisis petrolífera de mayor severidad que cualquiera de las que padecimos en el pasado", vaticinó con pesimismo el presidente de la reunión.
Tan sólo una hora y media después, justo el tiempo que duró la sesión inicial de la mañana, el propio Subroto anunciaba que se abordaría la discusión del reajuste de los diferenciales de los precios, y anunciaba como posible una reunión extraordinaria para enfrentarse de nuevo a la revisión de las cuotas, extremo que fue posteriormente confirmado -para celebrar antes de octubre- por el ministro iraquí Qassim Taki Al Oraibi, y por el viceministro ecuatoriano y presidente de la delegación de su país, Fernando Santos Albite.
La propuesta del jeque Yamani es la de que se revisen exclusivamente el precio del crudo pesado, sin que se varíe el de los ligeros, ya que, según señaló a los periodistas al iniciarse las sesiones, ello no haría sino incrementar las dificultades del mercado.
Precisamente el pasado mes de enero se produjo un importante reajuste en la diferencia que separaba los crudos de mejor calidad de los inferiores o pesados. Los hasta entonces cuatro dólares de diferencia pasaron a sólo 2,40 dólares, a través de un recorte en el precio de los ligeros y extra ligeros, y un aumento de los pesados, reajuste que contó con la oposición de algunos países, como Libia.
Posturas encontradas
No obstante, las posturas entre los distintos países miembros vuelven a estar encontradas. El quinteto integrado por Argelia, Irán, Irak, Emiratos Arabes Unidos y Libia se mostró ayer a favor de mantener inalterados los precios actuales. Sin embargo, son bastantes los países que se muestran de acuerdo con incrementar sustancialmente su cuota de producción para poder equilibrar sus cada vez mayores déficit públicos, entre los que se encuentran Irak, Gabón, Qatar y Ecuador.El ministro iraquí señaló con claridad que su deseo es "duplicar nuestra cuota actual de 1,2 millones de barriles al día", y en el mismo sentido se expresó el representante ecuatoriano Fernando Santos Albite, quien reconoció a este periódico que su Gobierno ya ha anunciado su intención de elevar su producción actual de 183.000 barriles diarios a 283.000 barriles a partir del próximo mes de agosto.
Otros países, entre los que se encuentra Venezuela, se muestran a favor de que se produzca una aproximación de los precios de la OPEP a los que rigen en el mercado libre, aunque dentro de una reestructuración global que se lleva a cabo actualmente. "Eso no quiere decir que nosotros propongamos un recorte de los precios, sino que queremos que se tengan también en cuenta otros factores", señaló un miembro de esta delegación.
Sin embargo, el ministro venezolano, Arturo Hernández Grisanti, afirmaba respecto a la decisión de México -que asiste como observador a esta reunión- de recortar unilateralmente el precio de su crudo pesado, que el país azteca "tomó la decisión que había que tomar en el momento oportuno".
