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La URSS inicia un programa agrario para garantizar el ábastecimiento alimentario

Pilar Bonet

Las autoridades de la URSS tratan de sacar adelante la agricultura del país, incapaz actualmente de asegurar el abastecimiento de alimentos de la población, pese a los centenares de directrices oficiales y las cuantiosas inyecciones de capital que han afectado al sector desde mediados, de los años sesenta, con un programa para extender las superficies agrícolas mediante el regadío y la desecación.

El programa, cuyas líneas maestras expuso el jefe del Gobierno soviético, Nikolai Tijonov, en el pleno del Comité Central del PCUS del pasado martes día 23, tendrá vigencia hasta el año 2000 y se centra en la lucha contra las condiciones físicas y climáticas en detrimento de factores estructurales. El énfasis puesto en la superación de la naturaleza hostil y el contraste con el lenguaje empleado por los economistas y expertos soviéticos más partidarios de reformas en la agricultura ha llamado la atención de los observadores políticos en la capital soviética."Se trata de un análisis brezneviano de la situación agrícola muy distinto de lo que podía esperarse durante la gestión de Andropov", señala una fuente soviética. Las palabras de Tijonov y del líder soviético Konstantin Chernenko ante el pleno del Comité Central tienen, efectivamente, matices muy distintos del lenguaje utilizado durante el mandato de Andropov, cuando el desarrollo del elemento intensivo, el incentivo material al campesino y la necesidad de una mayor eficacia eran temas prioritarios.

Tanto Tijonov corno Chernenko hicieron un verdadero alegato en favor del regadío y desecación de terrenos para aumentar las superficies cultivables, que se enfrentan con los terrenos pantanosos, inundados o helados por el norte y con la sequía por el sur.

Para el año 2000, según dijo Tijonov, la superficie de tierras de regadío estará entre los 30 millones y los 32 millones de hectáreas, y la superficie desecada, entre los 19 millones y los 21 millones de hectáreas (actualmente hay un total de 33 millones de hectáreas en conjunto). Con todo ello se pretende extender en un 50% los territorios agrícolas recuperados y duplicar los resultados de las cosechas. Según Chemenko, la URSS podrá así producir la mitad de su cosecha bruta "con independencia de las fluctuaciones climáticas".

La sequía, responsable

Los dirigentes soviéticos reconocieron que la cosecha de cereales de este año ha sido muy inferior a lo previsto y que el abastecimiento de carne en muchas ciudades es problemático. A la hora de buscar responsabilidades, la- sequía parece llevarse la palma. Más de un 60% de todos los terrenos agrícolas están localizados en zonas áridas, señaló Tijonov.Los proyectos de regadío que van a promocionarse afectan al norte del Cáucaso, la región del Volga, Ucrania, Moldavía y Asia central. Su realización está estrechamente ligada al desvío hacia el sur de parte del caudal de los ríos del norte y de Siberia. Es ésta una vieja idea que, tras un prolongado letargo, ha cobrado nueva fuerza este verano. Se trata de la construcción de un canal de 2.550 kilómetros para llevar agua de los ríos Ob e Irtish a la cuenca del mar de Aral.

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Sobre la firma

Pilar Bonet
Es periodista y analista. Durante 34 años fue corresponsal de EL PAÍS en la URSS, Rusia y espacio postsoviético.

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