La desgravación fiscal a la exportación disminuirá este año 22.200 millones de pesetas y 52.000 millones el próximo

El decreto que reducirá la desgravación fiscal a las ventas al exterior, medida contra la cual se han desatado numerosas presiones empresariales, está ya redactado y ha sido enviado a la Junta Consultiva de Aduanas, según fuentes de Economía y Hacienda. La medida, estudiada por el Gobierno dentro del paquete de disposiciones para recortar el déficit público este año en unos 300.000 millones de pesetas, afectará a 12 grandes sectores exportadores. Pero sus efectos selectivos no se ceñirán a un solo ejercicio: estudios efectuados por los autores de la disposición apuntan que aumentará los ingresos del fisco en 22.200 millones de pesetas darante la segunda mitad de este año y en otros 52.000 millones de pesetas en 1985.La noticia de que Hacienda estudiaba el recorte de los pagos realizados a los exportadores, para compensarlos de los impuestos incorporados a sus productos, se filtró al comité de coordinación de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) y a las cámaras de comercio a principios de mayo. En las primeras reacciones de oposición de los empresarios exportadores se desconocía el alcance de la medida, así como si tendría carácter general o selectivo. Todavía el lunes se conocía el contenido de una carta que el ex presidente de la CEOE, Carlos Ferrer Salat, dirigía al presidente del Gobierno, Felipe González, en la que afirmaba que "pretender reducir el déficit público a base de penalizar la exportación, única política económica que sostiene la actividad económica, parece una política contradictoria".

Los 12 sectores

Fuentes que han tenido acceso al decreto ya preparado por el Ministerio de Economía y Hacienda, desde donde el texto ha sido sometido a la Junta Consultiva de Aduanas, han confirmado que sus efectos serán selectivos. Sobre su contenido, y bajo la hipótesis de que entre en vigor durante el mes de junio, las simulaciones técnicas atribuyen a la disposición la posibilidad de ahorrar al fisco 22.200 millones de pesetas hasta finales de año y otros 52.000 millones en 1985. Para 1986 no han sido realizadas estimaciones.Hacienda entiende que la puesta en marcha del impuesto sobre el valor añadido (IVA) provocaría en los sectores afectados una reducción de desgravaciones similar en pesetas constantes a la que van a sufrir.

Por orden de mayor a menor volumen de desgravación, las ventas al exterior sobre las cuales pretende ser aplicado el decreto corresponden a los siguientes sectores: siderurgia, textil, libros, papel y cartón, vinos, maquinaria, automóviles, conservas, cementos, productos químicos, plásticos y corcho, calzado y otros no clasificables o con escasa actividad exportadora.

Algunos de estos sectores son, precisamente, los que mayores aumentos han experimentado en sus ventas al exterior durante el año pasado y en los cuatro primeros meses del presente ejercicio.

En concreto, de enero a abril, ambos inclusive, los productos siderúrgicos han elevado sus exportaciones respecto al mismo penodo del año anterior un 62,66%; los automóviles, un 54,23%; el calzado, un 71,41%, y los productos químicos, un 52,48%, según datos de aduanas. Sólo estos cuatro grupos han absorbido casi la tercera parte de todas las ventas al exterior durante el primer cuatrimestre, debido al gran peso de los automóviles (11,14% de todas las exportaciones) y de los productos del hierro y del acero (9,84%).

El problema que quiere atajar Hacienda radica en que, como la fiscalidad indirecta española es poco transparente, el fuerte crecimiento de las exportaciones puede originar elevaciones en la desgravación superiores a los impuestos realmente pagados y que se preténde compensar. Ello obedece a que resulta imposible determinar los impuestos pagados y se utilizan procedimientos indirectos.

En los automóviles, por ejemplo, la desgravación es del 11,5%, y se aplican dos bases de cálculo para la desgravación: el 95% de los precios interiores o el coste más los aranceles incorporados al vehículo.

Ya durante 1983 la desgravación fiscal a la exportación creció en 43.943 millones de peseta hasta situarse en 300.543 millones de pesetas. Las estimaciones iniciales para el presente año eran incrementar esta cantidad en algo menos de un 15%, pero la fuerte expansión de las exportaciones en lo que va de año ha desbordado los presupuestos y amenaza con engrosar el déficit público, según medios de la Administración.