Julio Esplá

Constructor fallero alicantino, ha patentado lo que él llama "el féretro del futuro", para acabar con los inconvenientes de los ataúdes convencionales. "Es desagradable , dijo Esplá a una emisora de radio alicantina, comprobar cómo los muertos se mueven en los ataúdes". Para evitarlo, su ataúd dispondrá de dos cabeceras y dos cintos de sujección, y en la parte de los pies habrá una especie de corredera con un tope de estatura. Así, "los familiares no sufrirán el horrible efecto que causa comprobar que el cadáver se mueve en el ataúd al bajarlo por la escalera". Julio Esplá ha pagado 10.000 pesetas por el certificado de su patente, que por el momento no tiene nombre, aunque, según él, se le puede llamar ataúd polivalente.