Dos individuos asaltan el correo Barcelona-Madrid y roban diez sacas con valores declarados
Dos individuos encapuchados y armados con pistolas asaltaron en la noche del jueves el tren correo que cubre el trayecto Barcelona-Madrid. El suceso tuvo lugar en las proximidades de la ciudad de Reus (Tarragona), a poco más de un kilómetro y medio de la estación ferroviaria. Los asaltantes lograron apoderarse de diez sacas con valores declarados y objetos asegurados. Una llamada telefónica al diario Avui responsabilizó del asalto a la organización independentista Terra Lliure, si bien en el grupo de atracos de la policía de Barcelona se informó a EL PAIS que no se daba credibilidad a esta reivindicación.
El valor de lo sustraído, según lo declarado por los remitentes en el momento de facturar los distintos efectos, sería de 183.500 pesetas.El tren correo Barcelona-Madrid tiene su salida a las 19.40 de Barcelona, y tiene su llegada a Tarragona a las 21,40 y a Reus a las 22.02. Anteayer circulaba con dos minutos de retraso cuando estaba a punto de entrar en esta última ciudad. Un kilómetro y medio antes de llegar a Reus existe una señalización luminosa. El primer disco estaba en ámbar y el segundo en rojo. Más tarde se comprobaría que el circuito en vía había sido manipulado. El tren se detuvo y en ese instante dos individuos subieron al vagón oficina, aprovechando que los funcionarios ya habían comenzado a abrir la puerta. En aquel momento se encontraban en el interior del compartimento cuatro funcionarios del cuerpo de Correos que realizaban tareas de selección de correspondencia.
Los asaltantes, tras obligar a los funcionarios a bajar del vagón, separaron diez sacas de Correos con valores declarados -billetes, joyas, talones....- y los arrojaron fuera del tren. Cerca del vagón había dos automóviles esperándoles con otros tantos individuos que cubrían la acción. Una vez cargadas las sacas, los asaltantes se dieron a la fuga. Según fuentes solventes, el asalto fue una operación calculada minuciosamente, al estilo del famoso asalto al tren de Glasgow. Los asaltantes cuidaron incluso de que los funcionarios no pudieran observar la huida. El tren continuó viaje hacia Reus, llegando a esta estación con diez minutos de retraso. Está previsto que cuando el tren encuentra rojo un semáforo del tipo del que manipularon los delincuentes permanezca parado tres minutos; al cabo de éstos, debe ponerse otra vez en marcha, aunque siga rojo. Por ello, ni el maquinista ni los demás empleados advirtieron nada.
En Reus fue alertada la policía y se procedió a denunciar el hecho. Controles policiales fueron instalados en una amplia zona con el fin de intentar dar con el paradero de los asaltantes. En una primera inspección del vagón se observó un impacto de bala en el compartimento. El disparo fue hecho en el momento del asalto. Dado que no hubo necesidad de forzar la puerta, se cree que fue realizado para intimidar a los funcionarios.
