Antonio Torrero apuesta por el intervencionismo para salir de la crisis

"A la vista de los condicionamientos que el modelo de competencia financiera está produciendo, sería conveniente que en vez de subordinar los sectores reales al financiero se ponga este último al servicio de la economía real", ha afirmado Antonio Torrero, catedrático de la Universidad de Málaga, en la presentación de su último libro (Tendencias del sistema financiero español, H. Blume Ediciones) en la Escuela de Economía.Antonio Torrero, que no dudó en mostrarse ferviente partidario del intervencionismo sobre el sistema financiero como fórmula para afrontar la salida de la crisis, se preguntó si el simple juego del mercado, tan sacralizado por los economistas ultraliberales, es válido para todos los países y para todas las circunstancias. "Yo pienso que la crisis económica en España no se puede resolver por el simple juego del mercado".

El autor, tras recordar su polémica con Rafael Termes en EL PAIS sobre los beneficios de la banca ("me he beneficiado del magisterio de Termes"), criticó la liberalización financiera y los efectos nocivos que se derivan de una competencia feroz entre las instituciones financieras. Dijo que la crisis bancaria la estamos pagando todos y que el coste de esta crisis, hasta el momento, ascendía a seiscientos millones de dólares, según el Financial Times.

Se mostró crítico, asimismo, con los partidos de izquierda por su afirmación de que las instituciones de crédito oficial deben competir con las instituciones financieras privadas en la captación de recursos y en la concesión de créditos. Resaltó, por otra parte, las contradicciones de la banca privada en sus críticas al déficit público, cuando estas instituciones son las más beneficiadas por la actual situación (la financiación del déficit supone unos activos financieros atractivos y sin riesgos).

Torrero indicó que "el endurecimiento de la competencia en el sistema financiero está llevando a una rigidez en la baja de los tipos de interés de los activos". Manifestó que en los últimos años no había habido política económica y que se ha estudiado muy poco desde una perspectiva microeconómica la causa por la que se han producido en nuestro país dos millones de parados.

Los catedráticos Juan Velarde y José Luis García, tuvieron palabras elogiosas para éste y comentaron algunos aspectos de su obra.