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Felipe González descarta el Gobierno de coalición

El secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Felipe González, ha enviado una circular a todos sus compañeros en la que pretende zanjar la polémica sobre un posible Gobierno de coalición con Unión de Centro Democrático (UCD). En la misiva afirma que los socialistas no pedirán esta salida a la situación política, sino que continuarán su «estrategia de oposición responsable». Al mismo tiempo, el Grupo Parlamentario Socialista del Congreso reeligió ayer a su comité permanente, tras analizar un documento en el que doce diputados reclaman mayor transparencia y democracia internas. La mayoría de las sugerencias contenidas en este escrito serán asumidas, al parecer, por la dirección del grupo.La circular referida de Felipe González, que tiene fecha del lunes pasado, día 10, se dirige concretamente a los partidos y federaciones de nacionalidad, región y el exterior. al comité federal y a los parlamentarios, y dice textualmente:

« Ante la avalancha de noticias, a veces confusas, de los últimos días, quiero aclararos netamente la situación. El partido sería fiel a la resolución política de su congreso y a las decisiones del comité federal que todos conocéis. En consecuencia, al margen de opiniones individuales y respetables de algunos compañeros, el PSOE no desea ni va a pedir un Gobierno de coalición».

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Doce diputados socialistas piden mayor participación en su grupo parlamentario

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« El PSOE, por el contrario », prosigue la circular de Felípe González, «continuará su estrategia de oposición responsable al actual Gobierno y encarará las próximas elecciones con la, confiianza de que los trabajadores y otros sectores ciudadanos apoyen mayoritariamente al partido».

«La situación es difícil, el partido necesita aunar esfuerzos para fortalecer la estrategia socioeconómica y política que venimos desarrollando en todos los frentes».

«Los responsables del comité federal deberán informar sobre los debates y la resolución de la reunión de los días 18 y 19 de octubre para evitar que se propague un clima de confusión».

«Saludos socialistas. Felipe González, secretario general».

Reunión del grupo parlamentario

Paralelamente, el Grupo Parlamentario Socialista reeligió ayer a su comité permanente. El presidente del mismo, Alfonso Guerra, defendió la gestión del comité, que fue aprobada con 57 votos a favor; en contra votaron Pablo Castellanos, Luis Gómez Llorente y Joaquín Navarro; se abstuvieron catorce diputados, entre ellos algunos de los firmantes del escrito antes mencionado.

Posteriormente se procedió a la votación para elegir el comité permanente, para lo que se había presentado una sola candidatura, integrada por los que habían ocupado hasta entonces la dirección del organismo.

Del total de 87 votos emitidos, 16 lo fueron en blanco, atribuibles al «sector crítico». El resto de los resultados es el siguiente: Alfonso Guerra, presidente, 72 votos: Gregorio Peces-Barba. secretario general, 61 . Virgilio Zapatero, secretario adjunto, 62. Vocales: Enrique Barón, 59, Félix Pons. 55, José Vida Soria, 60, y Antonio Sotillo, 50.

El comité de disciplina ha quedado integrado por: Máximo Rodríguez, que obtuvo 59 votos, Miguel Angel Martínez, con 57, y Francisco Ramos Molins, con 57. Los tres son también reelegidos.

En el transcurso de la reunión doce diputados, entre los que figuran Luis Solana, Felipe Guardiola, José Miguel Bueno, José Luis Rodríguez Pardo, Joan Lerma y Pablo Pardo, sometieron a la consideración de sus compañeros un documento en el que proponen una mayor participación y transparencia, de tal forma que el Parlamento sincronice mejor con la sociedad española.

«El Parlamento», señala el escrito, «puede afirmarse que no expresa hoy de manera suficiente las tensiones y los problemas que tiene la sociedad española. Si en el interior de los grupos parlamentarios no se genera una verdadera dinámica política, una tensión permanente de reflexión y debate, difícilmente estaremos en condiciones de recibir y de emitir un mensaje político vivo y actual. La revitalización del Parlamento pasa en buena medida por la revitalización de los grupos parlamentarios y por la participación en ellos de todos y cada uno de los miembros que los componen. El Grupo Parlamentario Socialista tiene en este tema, como en tantos otros, la responsabilidad de marcar la pauta».

"Ni recelo, ni disciplina ciega"

El documento señala también que en el interior del grupo parlamentario debe desarrollarse un profundo debate político en relación con las cuestiones legislativas o fenómenos políticos que resulten de mayor importancia. A este respecto se indica que «la eficacia del trabajo parlamentario pasa por la recuperación de la palabra del parlamentario a todos los niveles, pero esa palabra debe ser la expresión también del trabajo y del estudio. La gran plataforma pública que para el partido significa su grupo parlamentario no puede llevar ni a recelos ni a disciplina ciega. En lo que no precise de acuerdos orgánicos habrá de trabajarse a corto plazo para que la dirección y el grupo tengan claros sus papeles en la lucha global por el socialismo».

El escrito contiene un análisis de la política parlamentaria que ha desarrollado el Grupo Socialista. Tras afirmar que «solamente con ocasión de los grandes debates logramos transmitir la alternativa socialista», se exponen como razones de la situación denunciada: a) desviaciones técnicas que oscurecen las diferencias políticas entre los distintos partidos; b) aceptación de la iniciativa legislativa gubernamental, y c) falta de seguimiento constante de las iniciativas parlamentarias socialistas y de los compromisos del Gobierno. Para corregir esta situación, los firmantes del documento proponen, entre otras cosas, que los debates en el Pleno deberán ser eminentemente políticos, «buscando la apoyatura que permita tener una discusión sobre los contenidos políticos de cada ley de forma nítida y comprensible».

Al abordar la participación en el interior del Grupo Parlamentario Socialista, se estima que «no es preciso detenerse mucho en un tema en el que -por las razones que sean, difícilmente imputables a nadie en concreto- hay una coincidencia generalizada y unos deseos ampliamente compartidos de mejorar la actual situación».

Las medidas que se postulan para modificar esto son:

a) Celebración de un pleno semanal del grupo parlamentario en la mañana del martes, durante el que se producirían al menos dos debates distintos: uno sobre las actividades legislativas previstas y otro, sobre los problemas políticos y económicos que se consideren de mayor importancia y actualidad, y sobre los que el grupo debería fijar posiciones.

b) Incremento del papel del parlamentario en las ponencias y comisiones.

c) Formulación de un sistema orgánico dentro del grupo que permita a todas las regiones y nacionalidades tener su propia voz en el grupo y en la Cámara.

Por último, en cuanto a las relaciones entre el grupo parlamentario y la dirección del PSOE, el documento precisa que en todos los temas en que no haya acuerdos o, directrices de los órganos de dirección del partido será el grupo quien fije autónomamente su posición.

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