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Es posible que en 1980 haya estabilidad en el mercado del petróleo

La Fundación para la Investigación de la Industria Petrolera alegró ayer, jueves, las caras de los consumidores y de los gobernantes norteamericanos al publicar un informe en el que analiza favorablemente las perspectivas energéticas para el año próximo.

A pesar de la reducción en la extracción de crudo de los pozos iranies y de la escasez que se vivió en la primavera, sobre todo en la de Estados Unidos, el nivel de producción de los países de la OPEP es más alto que nunca, de acuerdo con los resultados del informe.La Fundación para la Investigación de la Industria Petrolera llegó a la conclusión de que en el mejor de los casos la OPEP dará salida, en 1980, a 32 millones diarios de barriles de crudo. Si las circuristancias son, sin embargo, negativas -que Arabia Saudí redujera de nuevo su nivel de producción a menos de nueve, millones de barriles-día, y que Irán adoptara similares medidas-, la cantidad de crudo que se extraería al día se establecería en los veintiocho millones de barriles.

Opción pesimista

Esos veintiocho millones serían ligeramente inferiores a las necesidades mundiales y provocarían tensiones y colas ante las gasolineras iguales a las de este año, pero, comenta el informe energético, es altamente improbable que todas las condiciones contrarias posibles se unan en los doce meses del año que viene para fabricar tan desolador panorama.La fundación elaboradora de las predicciones ha estimado, por el contrario, que es incluso bastante posible que en 1080 sobre petróleo.

Algunos analistas norteamericanos llevan algún tiempo expresando públicamente sus temores de que Arabla Saudí, el mayor productor del mundo, reduzca en octubre o noviembre su ritmo de extracción, si no considera suficientes los esfuerzos de Estados Unidos para convencer a Israel de que ceda en algunas de las demandas palestinas.

Arabia Saudí aumentó antes del verano, a petición norteamericana y como gesto de amistad, su producción hasta los actuales nueve millones y medio de barriles diarios, pero una de las grandes incógnitas de la política de este país es cuál fue el precio de ese gesto amistoso y cuál su plazo de vencimiento.

El otro interrogante que los expertos en adivinar científicamente el futuro petrolero se plantean es la capacidad real de Irán para mantenerse después de la revolución como la potencia exportadora que era.

El Departamento de Estado facilitó ayer datos que indican que el Gobierno del ayatollah Jomeini está extrayendo diariamente de sus pozos entre 3,7 y 3,9 millones de barriles, de los cuales exporta 3,1 millones.

De sostenerse ese nivel de producción iraní y de no mezclarse de forma negativa la política norteamericana hacia Oriente Medio con el comportamiento de mercado de Arabia Saudí, en 1980 habrá crudo suficiente para todos, se desprende del informe difundido ayer en esta ciudad.

Quizás después de tenerlo en cuenta, el presidente Jimmy Carter declaró ayer que la situacióñ petrolera ayudará a que la inflación de dos cifras disminuya en Estados Unidos.

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