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Caza y pesca

Los terrenos controlados, solución para el cazador modesto

La escasez de piezas en los terrenos libres obliga a la creación de zonas de caza controlada. En estos terrenos todo cazador modesto podría cazar varias veces al año. La provincia de Madrid no tiene ninguna, pero existe el proyecto de crear una en el valle del Lozoya, capaz de acoger a todos los cazadores federados de la provincia -unos 20.000-, que podrían acudir allí dos o tres veces por temporada.

Las gestiones realizadas hasta ahora han resultado negativas. Los pueblos de la zona no se conforman con que se les conceda el 25% de los permisos, pero hacen falta sus terrenos para la creación de esa zona de caza controlada junto con otros de reserva y de montes del Estado.La práctica cinegética en los terrenos de caza controlada se realiza a través de las sociedades que estén acogidas a este régimen. En Madrid no hay ninguna, puesto que todavía no existe ningún terreno de este tipo. El cazador, a través de la sociedad, se hace con el permiso correspondiente y puede matar el cupo asignado de piezas. El valle del Lozoya permitiría además la práctica de la caza mayor por un precio asequible a cualquiera.

Podrían ir de diez a treinta cazadores, que pagarían doscientas pesetas cada uno, con un suplemento de mil por cada jabalí cobrado. También sería factible la autorización de batidas, en las que se cobrarían 3.600 pesetas por cada grupo de cazadores -entre doce y dieciséis- y 1.500 por jabalí.

De llevarse a efecto la zona de caza controlada en el valle del Lozoya se repoblaría de perdices, ya que en la actualidad no son muy abundantes, y se plantarían semillas qué permitiesen su aclimatación al no haber sembrados. El conejo es particularmente abundante, mientras que escasea la liebre.

Llegó el tiempo del lucio

Con las lluvias ha llegado el tiempo óptimo para la pesca del lucio. La temperatura ha quedado regularizada y el cielo nublado permite, ya el variado uso de las cucharillas. Esta especie fue importada de Francia. En abril de 1949 la piscifactoría de Aranjuez recibió 50.000 huevos embrionarios procedentes del alto Marne. Meses después se conservaron cuarenta ejemplares para reproducción y 225 fueron soltados en el río Tajo. En los años siguientes la repoblación en España continuó alcanzando su cenit en 1957, con la suelta de 1.255.200 alevines.

El lucio habita en ríos de corriente lenta y embalses ricos en vegetación sumergida. En el fondo permanece inmóvil, al acecho de otros peces menores, de los que se alimenta. Raramente se aleja del lugar de nacimiento si encuentra comida suficiente. Nunca se alimenta de peces muertos. Su digestión es lenta y mientras dura permanece como aletargado. El lucio nunca mata por matar, sólo lo hace por una necesidad vital de supervivencia.

El desove se efectúa en los meses fríos del año y en las zonas de escasa profundidad, próximas a la orilla, por lo que es en esta época cuando más fácil es la captura de grandes ejemplares. Las hembras vienen a producir unos 30.000 huevos por kilo de peso.

Cuando se pesque el lucio debe hacerse con nailones fuertes, del treinta al cuarenta, debido a su gran tamaño -puede pesar más de veinte kilos- La potera o la cucharilla debe ir unida a la línea mediante un cable de acero, pues el lucio está provisto de una fortísima dentadura. El cebo siempre debe estar lo más próximo al fondo posible. Si se pesca con cucharilla, ésta debe accionarse lentamente, para que no vaya por la superficie, aunque para ello hay que tener en cuenta el peso de la misma y su forma, pues puede utilizarse la del tipo ondulante, que trabaja más en superficie, o la giratoria, que profundiza más.

Las tablas solunares para este Fin de semana son: sábado, 8.45 y 21.10; domingo, 9.30 y 15.25. El Sol sale a las 7.40 y se pone a las 17.48.

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