"A los barrios los politiza el Gobierno"
«¿No dice Fraga que vamos ajugar un importante papel en la vida política local? Pues que nos deje unirnos y manifestarnos. Lo del 22 de narzo en el cine Alcalá fue iñcreíble».José Osuna Cabrera, cuarenta y ocho años, casado y con cuatro hijos. Ejerce como oficial segunda administrativo. Dieciocho mil pesetas al mes. Presidente de la Asociación de Vecinos de Palomeras Bajas. «Para "tirar" llevo otras contabilidades ». Nació en Constancia (Sevilla), estúdió hasta los catorce años y lleva doce en Madrid, en Palomeras.
«La Asociación nació en una mesa-camilla, coja varios matrimonios jóvenes hablando alrededor de ella y un cura francés; era muy majo el hombre, que nos ayudó a copiar los estatutos de otra. Aquí existía una asociación de cabezas de familia a la que había que pertenecer para que los niños pudieran entrar en el colegio. Lo primero que hicimos fue oponernos a eso y empezar a decirle a todo el mundo que el barrio llevaba doce años sin luz, sin colegio estatal, con ratas, sin asfaltar. Luego, al cabo de doce años, vino García Lomas a inaugurar la luz y se enfadaron porque enseñamos pancartas de protesta en lugar de aplaudir. Buscamos reivindicar una serie de derechos que nunca hemos tenido y liberarnos como personas. Lo que hago lo hago porque creo que es lo más conveniente, siempre que los vecinos aceptón».
-¿Por qué se presentó a las elecciones de presidente de la Asociación?
-Porque es un puesto en el que hay que dar la cara, tener tiempo libre y porque me pidieron que me presentara. No es fácil encontrar una persona que esté dispuesta a responsabilizarse de los actos de una asociación que, por regla general está mirada con lupa desde arriba.
La ideología de José Osuna se resume en la necesidad de buscar el bien común. «Eso es lo primero que tendría que conseguir un al calde elegido democráticamente ». Anticlasista visceral, piensa que lo más importante es la dignidad de la persona. El personaje del futuro político nacional debe ser, en su opinión, un luchador anónimo.
-¿Cual es el momento actual del movimiento asociativo?
-Por una parte, existe un deseo cada vez mayor por participar-de los problemas de la ciudad y su tratamielito, pero, por otra, existe un Gobierno que no les deja hacerlo. Es el Gobierno el que politiza los barrios con su política de negación constante. Los vecinos necesitan reivindicar sus derechos; y éste es un movimiento lógico de lucha por conseguirlo, cada día más fuerte.
-Usted es miembro fundador de la Federación de Asociaciones, ¿por qué participó en su nacimiento?
-Porque creo que servirá para unificar las fuerzas y ejercer presión ante la Administración. En las asociaciones existen fuerzas políticas muy claras, pero sería un error que la Federación tratase de buscar solamente ese aspecto. Debe atender a todos y tratar de trabajar por todos, sea cual sea la política que lleven. La lucha nuestra está planteada ahora contra una ley de Régimen Local que no permite participar a los vecinos. Pedimos que el alcalde sea elegido por nosotros y que sea una persona que haya sufrido las consecuencias de vivir en un barrio obrero.
