Simeone, el superviviente
Las lesiones obligan al técnico del Atlético a reinventarse una vez más y buscar soluciones para incomodar a los campeones
La cabeza de Diego Pablo Simeone lleva varios días en plena ebullición. Le ha ocupado la búsqueda intensiva y el testeo mental de soluciones que le permitan presentar esta noche un once y un plan solvente que incomode al Real Madrid.
En el club hablan de un entrenador al que se le ha detectado excitado ante el desafío de tener que recomponer el equipo ante una cita tan trascendental. Las lesiones de Juanfran y Vrsaljko le han dejado sin sus dos laterales derechos naturales. La última, la de Giménez, sin el parche que había encontrado en los tres últimos partidos para el puesto.
Hay directivos que en las últimas horas han observado a un entrenador al que la dificultad le ha despertado sobremanera el instinto de supervivencia. En el yo de Simeone hay una tendencia a la rebeldía ante los inconvenientes. Se maneja con seguridad cuando percibe que puede encontrarse en inferioridad. Le llenan las victorias que se cimentan bajo el estímulo de que con menos su equipo hizo más.
En ese contexto, emerge en Simeone esa excitación del entrenador obligado a buscar soluciones en situaciones extremas. “En el fútbol argentino estamos acostumbrados a que hay que buscar alternativas porque no hay dinero. Hay que buscarse la vida para resolver situaciones”, explica El Cholo cuando le preguntan por las soluciones que ha tenido que inventarse este curso ante las plagas de lesiones que han afectado a su equipo. Juanfran de interior, Giménez de mediocentro y lateral derecho, Griezmann, delantero y enganche, Carrasco como segundo punta y Saúl en cualquiera de las dos bandas han sido algunas de las soluciones que ha tenido que inventarse esta temporada. Esta noche, los focos estarán puestos en quién será el elegido para ocupar el lateral derecho. “A ver a quién pone Simeone, capaz que juega él”, bromea Diego Godín. Para resolver el problema, Simeone ha acudido de nuevo al fútbol total y anárquico de la infancia, libre de las ataduras posicionales. Ya lo hizo en medio de la crisis de resultados que afectó a su equipo en diciembre, cuando apeló al amateurismo para despertar en sus jugadores el placer de jugar al fútbol.
Fútbol de plazoleta
“El fútbol es un juego de equipo y este sostiene las ausencias. Esto es como cuando eras niño y te juntabas en la plaza con tus amigos y decías “tú juegas atrás, tú en medio, yo adelante...”. En estos partidos es más fácil decirle a un jugador que tiene que entrar y jugar ahí”, defiende el técnico rojiblanco. En la respuesta no ofreció dudas sobre lo que pasa por su cabeza, aunque generó una duda que puede afectar al sistema de juego que emplee. “Tengo muy claro quién va a jugar de lateral derecho... o carrilero”. El término carrilero se aplica a los defensores de banda cuando se utilizan tres centrales. Bajo ese dibujo, Lucas, Godín y Savic ocuparían el eje de la zaga, con Filipe a la izquierda. A la derecha podrían ser Koke, Saúl, o Thomas. La decisión, en cualquier caso, es arriesgada por lo que supone probar un sistema nuevo en un partido de tanta trascendencia y ante un rival que amenaza mucho desde el aguijoneo de sus dos laterales.
El riesgo asoma en cualquiera de las decisiones que tome Simeone. Con cuatro atrás, Savic o Lucas ocuparían el lateral derecho. El montenegrino, que en su selección se ha desempeñado alguna vez en esa posición, lo hizo en Leicester tras la lesión de Juanfran y a su entrenador no le convenció. Lucas es zurdo cerrado. Hasta la inclusión de Carrasco, que ha comunicado su intención de jugar pese a su lesión de clavícula, es temeraria. “Pero no nos vamos a ir sin jugar”, concluye Godín.
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