Casemiro y la idea Zidane

La comunión entre los jugadores del Madrid y Zinedine Zidane es tal que la plantilla no sólo ha hecho suyos los mensajes del técnico, sino que cuando los repite lo hace convencida de su discurso. No suenan a “lo digo porque hay que decirlo”. Del mismo modo que Pepe dice que el técnico les ha pedido que disfruten del fútbol porque eso un día se va a acabar, Zidane dice que está progresando como entrenador, pero que nunca está todo conseguido y que como a lo mejor en once meses lo que está viviendo puede acabarse, lo que quiere (y hace) es disfrutar de cada entrenamiento.

Y en ello anda antes de comenzar hoy (20.45 beIN Sports) su andadura en la Champions contra el Sporting de Lisboa. Lo hará en el Bernabéu, tres meses y medio después de conseguir la Undécima. Ningún equipo, desde el nuevo formato (1992), ha conseguido ganar la Champions dos años seguidos. “Mi plan para hacerlo es trabajar día a día, estar preparados y entrenar bien”, dijo ayer.

Más información

Zidane: “Van a exigirnos mucho más por ser los campeones”

Kovacic ya no se esconde

Dice también que lo que más le motiva e ilusiona es el día a día. A juzgar por las caras y el buen ambiente, parece que a sus jugadores también. En la plantilla hay un futbolista que transmite a la perfección la idea de grupo y de disfrute que ha impulsado Zidane. Una idea que, evidentemente, es más fácil llevar si encima las cosas van bien como le están yendo al Madrid. Ese jugador es Casemiro. Un mediocentro de 24 años que asegura —lo hizo en una entrevista en Marca— que nada le hace disfrutar más que robar un balón y escuchar los aplausos del Bernabéu (sólo Roncaglia, por cierto, lleva más recuperaciones que él en la Liga, 21 por las 20 del brasileño). Un futbolista que cuando le preguntan si se ha hecho dueño del mediocentro del equipo responde que no, que él sólo se siente dueño de su responsabilidad con la camiseta blanca y que, lejos de sentirse titular indiscutible, se siente un privilegiado por estar en el Madrid. La ilusión y el grupo ante todo.

Dice Casemiro que todos se sienten en deuda con Zidane porque se ha ganado a los jugadores desde la humildad. “¿Eso le facilita las cosas a la hora de hacer los descartes?”, le preguntaron ayer al técnico francés que ya puede contar con toda la plantilla (salvo Keylor Navas y Coentrao) y por primera vez ha tenido que dejar fuera a cuatro futbolistas de la convocatoria.

“No es fácil, para nada. Yo tuve un entrenador, del que no diré el nombre, que pensaba que con once jugadores bastaba, que once eran los que tenían que jugar y que, como mucho, cuando faltaba uno ponía a otro, y ya. Yo no pienso eso en absoluto. Con las competiciones que tenemos, la dificultad de jugar cada tres días, para mí lo importante es el grupo. Siempre pensaré así, me quede aquí diez días, un mes, un año. Es mi pensamiento de entrenador, los jugadores lo entienden porque es lo lógico”, contestó Zidane.

Ilusión y trabajo

La lógica, entiende él, es que hay 24 jugadores que se entrenan a diario con la misma ilusión y que el número 24 tiene el mismo derecho a jugar que el que juega siempre. ¿Lo entienden los jugadores? “Los jugadores lo saben, si tú lo explicas lo entienden, queremos ganar cosas y vamos a intentarlo haciéndolo así. Siempre pasará que uno juegue más que otro y no le voy a mentir al jugador, pero uno si se entrena todos los días como todos los demás, tiene que tener minutos”, prosiguió el técnico asegurando que las rotaciones no son un instrumento para contentar a todos, sino una forma de ver el fútbol, impulsar al grupo, y premiar la profesionalidad de todos.

Kovacic, después de su buen partido contra Osasuna, se sentará muy presumiblemente en el banquillo esta noche. Kroos, que jugó todo el partido el sábado, puede que entre en el plan de las rotaciones. Nacho, que ocupó el carril de Marcelo contra Osasuna, se ha quedado fuera de la convocatoria para el partido de esta noche. Igual que Asensio, después de su gran comienzo de temporada. “Es mi cargo, mi responsabilidad. Lo peor para un entrenador es dejar fuera a cuatro que hacen lo mismo que todos: trabajar con ilusión”, explicó Zidane. A Casemiro, por ejemplo, le tocó quedarse fuera en el último partido de Liga ante Osasuna.