Breaking Bad: Azul y negro intenso
El color negro es Heisenberg. El lado Darth Vader de Walt, el que maneja el negocio de la droga y elimina sin contemplaciones a la competencia. El profesor White pasa de ser un hombre que ha vivido "con miedo durante 50 años” a hacer lo que sea para conseguir dinero rápido. Primero lo hace escudado en la ingenua idea de dejar a su familia sin preocupaciones económicas. Pronto llega la competencia de las bandas locales, la amenaza de los cárteles mexicanos y las repercusiones de todas las mentiras en su entorno más cercano.
Verde. Es el color que domina en la cabecera de Breaking Bad y es el color del dinero que pone en marcha la historia: El profesor de química Walter White (el multipremiado Bryan Carston), agobiado por un seguro médico deficiente y un sueldo mísero, toma la decisión de meterse a fabricante de metanfetamina después de saber que tiene un cáncer avanzado de pulmón, para evitar dejar a su familia en la ruina. Una decisión que termina siendo una bomba de efecto retardado que dinamita la vida de todos los que le rodean. Empezando por su socio y antiguo alumno Jesse Pinkman (Aaron Paul, Emmy al mejor secundario el año pasado).
Amarillo. El color del desierto de Nuevo México. Los protagonistas de Breaking Bad viven en Duke, una suburbio impersonal de la ciudad de Alburquerque. El ambiente de Breaking Bad es denso, sofocante, frustante… Walter es un profesor de instituto sobrecualificado que tiene que mantener dos empleos para sacar a su familia adelante. Jesse, un veinteañero fracasado que ni siquiera consigue ser un camello decente. Los dos aprenderán a golpes cómo se mueve el negocio de la droga a los dos lados de la frontera.
Azul. El color del cristal que elaboran Jesse y Walter. Gracias a los conocimientos del profesor White, la droga de mejor calidad a los lados de la frontera. Esa es la parte fácil, lo complicado es moverla en las calles. En Estados Unidos tienen que despistar a la DEA y someter a las bandas rivales. En México, tendrán que competir con el dominio de los cárteles más violentos que no se quedarán de brazos cruzados ante la llegada de un nuevo capo al gremio.
Verde. Es el color que domina en la cabecera de Breaking Bad y es el color del dinero que pone en marcha la historia: El profesor de química Walter White (el multipremiado Bryan Carston), agobiado por un seguro médico deficiente y un sueldo mísero, toma la decisión de meterse a fabricante de metanfetamina después de saber que tiene un cáncer avanzado de pulmón, para evitar dejar a su familia en la ruina. Una decisión que termina siendo una bomba de efecto retardado que dinamita la vida de todos los que le rodean. Empezando por su socio y antiguo alumno Jesse Pinkman (Aaron Paul, Emmy al mejor secundario el año pasado).Amarillo. El color del desierto de Nuevo México. Los protagonistas de Breaking Bad viven en Duke, una suburbio impersonal de la ciudad de Alburquerque. El ambiente de Breaking Bad es denso, sofocante, frustante… Walter es un profesor de instituto sobrecualificado que tiene que mantener dos empleos para sacar a su familia adelante. Jesse, un veinteañero fracasado que ni siquiera consigue ser un camello decente. Los dos aprenderán a golpes cómo se mueve el negocio de la droga a los dos lados de la frontera. Azul. El color del cristal que elaboran Jesse y Walter. Gracias a los conocimientos del profesor White, la droga de mejor calidad a los lados de la frontera. Esa es la parte fácil, lo complicado es moverla en las calles. En Estados Unidos tienen que despistar a la DEA y someter a las bandas rivales. En México, tendrán que competir con el dominio de los cárteles más violentos que no se quedarán de brazos cruzados ante la llegada de un nuevo capo al gremio.
Gris. Los personajes de Breaking Bad se mueven en una escala amplia de grises. La figura de Walter se va ensombreciendo a medida que avanza la serie y va perdiendo los escrúpulos por el camino. Las meteduras de pata y las adicciones de Jesse complican el negocio y vuelven su vida personal un completo desastre. Destaca la relación codependiente que desarrollan Pinkman y Walter: a pesar de todas las idas y venidas y todos los reproches, ya no pueden sobrevivir el uno sin el otro.
Skyler White (Anna Gunn) La mujer de Walter tiene que lidiar al comienzo de la serie con un embarazo inesperado y el cáncer que le diagnostican a su marido. Al principio ignora la doble vida que lleva Walt y prefiere pasar por alto todos los detalles que no empiezan a cuadrar. Cuando descubre la verdad, no dejará pasar la oportunidad de participar en la lucrativa empresa familiar.
Hank (Dean Norris), agente de la DEA y cuñado de Walt. Egocéntrico y prepotente al principio de la serie. Sufre en sus propias carnes los cabos sueltos que va dejando Walter, sin saber que el poderoso Heisenberg que busca su departamento es misma persona con la que él comparte barbacoas los domingos.
Saul Goodman (Bob Odenkirk). El picapleitos, el especialista en ganar dinero a base de demandas surrealistas: "Better call Saul". Su gran error es infravalorar el negocio de Walt y Pinkman y la violencia que hay que emplear para mantenerlo a flote sin morir en el intento. El que se creía tan listo, no lo era tanto.
Gus Fring(Giancarlo Esposito). El señor Pollo es el prototipo de villano en la serie. Su gris es la doble vida que lleva. De puertas adentro gestiona con mano dura su negocio de droga y se convierte (por OPA hostil) en el jefe de Walter y Jesse. De cara al exterior solo es el callado dueño de Los pollos hermanos.
En España, Breaking Bad se puede ver en Paramount Comedy (Dial 23, Digital +)
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