Las víctimas de la violencia machista

5 de enero. Ana María Sánchez

Una persona poco comunicativa, rara y obsesionada con los libros y la sabiduría. No en vano se proclamaba admirador de Sócrates. Y enemigo de la televisión. Así era Julio José Zapata, de 52 años, que se quitó la vida después de acabar a tiros con la de su esposa, Ana María Sánchez, de 49 años, y la del hijo de ambos, Carlos, de 16, en Torrecaballeros (Segovia). El matrimonio estaba iniciando los trámites de separación. Madre e hijo son descritos como amables y extrovertidos, frente al carácter duro del homicida, lo que hacía que Ana María y Carlos se refugiaran entre sí. Incluso los dos viajaban solos, porque el padre no quería salir de casa, hasta el punto de que prefirió pasar las Navidades de 2010 en solitario, mientras su esposa y el chaval lo hacían fuera con la familia. No había denuncias por malos tratos ni órdenes de protección a favor de la mujer y el menor.

13 de enero. W. L.

La trastienda de una tienda en Granada fue el lugar donde un hombre de nacionalidad china de 32 años acabó presuntamente con la vida de su pareja, W.L., una mujer de la misma nacionalidad de 29 años. Los vecinos alertaron de ruidos y gritos que hacían pensar que en el interior del local se estaba produciendo una fuerte discusión. La policía entró a través de una ventana y encontró a la mujer, que yacía boca abajo con una herida abierta en el cráneo. Los agentes encontraron en el inmueble a su compañero sentimental con el atuendo ensangrentado. Los agentes se incautaron de una losa de mármol que pudo ser el arma homicida. La pareja tenía un hijo en común de seis años que reside en China.

18 de enero. Carmen

La vecina se quedó sorprendida al ver a Francisco tambaleándose mientras caminaba por la calle en Fuenlabrada (Madrid). "¿Está usted bien?", le preguntó. "Sí, sí, no crea usted que estoy borracho. Solo un poco mareado", dice ella que contestó. El hombre, de 47 años, se apoyó a continuación en un coche aparcado frente al portal de su vivienda. Pasados unos minutos accedió al interior. Unas horas antes o después de esta escena, eso está aún por determinar, Francisco estranguló con un cordón a su mujer, Carmen, de 54 años, con la que compartía una habitación de alquiler en la localidad madrileña. Tras perpetrar el crimen se echó a la calle. La inquilina de la vivienda, una mujer ecuatoriana que subarrendaba habitaciones para poder hacer frente a los pagos, se encontró el cadáver de Carmen tendido en la cama. La mujer contó a los agentes que la pareja, española, llevaba un mes viviendo ahí. Los policías se pusieron a buscar a Francisco, pero no tuvieron que ir muy lejos. Se había sentado a esperar en una plaza a unos 100 metros del lugar del crimen. La policía no tiene constancia de que Carmen presentase denuncias por malos tratos en los últimos años.

26 de enero. Lady Yeni P. A.

Se llamaba Lady Yeni P. A. Tenía 34 años y era de origen cubano. Estaba en España desde hacía 14 años. Vivía en la pedanía de Los Belones, en Murcia. Su pareja sentimental la asesinó asestándole al menos una decena de puñaladas en el abdomen. Se llama Antonio F. E. y es un vendedor de coches de La Unión (Murcia), de 56 años, conocido como

28 de enero J.A.A

J.A.A, mujer asesinada el pasado 28 de enero en Fuerteventura nunca pidió ayuda por maltrato. La mujer hallada muerta a golpes y desfigurada en Fuerteventura no había pedido ayuda en ninguno de los recursos públicos de asistencia a la violencia de género. El caso se catalogó por el Gobierno canario como una víctima de este fenómeno ya que fue un 'episodio macabro', tuvo unos indicadores importantes, como el tratamiento que recibió esa mujer antes de morir y el ensañamiento que hubo con ella, que justificaron que se catalogara como tal.

29 de enero. María Jesús Rufas

María Jesús Rufas, de 74 años, murió asesinada en su chalé de Calviá (Mallorca) cuando su marido, Bartolomé Verger, de 86 años, le disparó por la espalda dos tiros en la cabeza mientras estaba en su sillón. Posteriormente él se sentó en el sofá ante el cadáver de la que fue su esposa durante medio siglo y se suicidó. El criminal no actuó de improviso ya que advirtió a un pariente de que no era precisa su visita el fin de semana. Inicialmente, al hallarse los cadáveres, se barajó la hipótesis de una doble muerte convenida por dos personas ancianas y solitarias, sin hijos. La Guardia Civil, la autopsia y el delegado del Gobierno, Ramón Socias, avalaron la tesis del crimen de violencia de género. María Jesús fue atacada por sorpresa. En la casa no había señales de desorden y el cuerpo de la mujer presentaba los dos orificios craneales de las balas pero no tenía erosiones por un intento de defenderse de una agresión o disputa previa, ni magulladuras en brazos o golpes en cara, según los investigadores.

30 de enero. Ramona Martínez

Ramona Martínez, de 44 años, murió desangrada en su domicilio de Villacarrillo, Jaén, tras recibir dos puñaladas, una en el abdomen y otra en el cuello. Su marido, Alfonso G. A., de 47 años, se confesó autor material de los hechos. Así lo comunicó a su cuñado. Posteriormente, no opuso resistencia alguna al llegar los agentes de la Guardia Civil. El marido había sido detenido en Andorra en 2010, donde vivía el matrimonio antes de regresar a su tierra natal, por amenaza y maltrato leve a su mujer. Tenía una orden de alejamiento desde abril de 2010 por un periodo de cuatro años. El matrimonio tenía dos hijas, de 25 y 21 años. La mujer llevaba tiempo viviendo un calvario con su marido, sobre todo a raíz de comunicarle su decisión de separarse. Días antes de su muerte decidió viajar a casa de su hija mayor en Andorra para calmar los ánimos de su esposo. Después regresó a su pueblo. Fue recogida en la estación de autobuses por su marido, que la llevó al domicilio familiar y, poco después, cometió presuntamente el asesinato. A la hija pequeña, que vivía con ellos, la había mandado a casa de unos familiares en una aldea cercana.

30 de enero. J.M.M.

De 43 años, J.M.M. fue hallada muerta en el interior de su casa en Campo de Criptana (Ciudad Real) con heridas en el cuello. Su marido, de 40, llamó a su hermana para contarle que había acabado con la vida de su pareja, según contó el alcalde de la localidad, Santiago Lucas-Torres. Posteriormente, se tiró por el balón del segundo piso de la vivienda familiar donde ocurrieron los hechos, resultando herido grave. La pareja, natural de Campo de Criptana, tenía una hija de 13 años.

3 de febrero. C.T.

11 de febrero. Desconocida

Una mujer dominicana de unos 30 años era asesinada en su domicilio en el barrio de Gràcia de Barcelona. Una llamada al teléfono de emergencias alertó a la policía autonómica, que acudió a la vivienda. Los Mossos d'Esquadra hallaron el cadáver de la mujer con signos de violencia y, junto a ella, a un hombre herido por arma blanca, Pedro Pascual M.C., de 27 años, que fue detenido.

15 de febero. Susana G.

Susana María Galeote, de 37 años, falleció una mañana del mes de febrero en plena calle en la barriada malagueña de El Palo, como consecuencia de un hachazo que le asestó su expareja, un hombre de 41. El homicida tenía una orden de alejamiento de la víctima, según informó Gema del Corral, directora del área de la Mujer del Ayuntamiento de Málaga, el día del crimen. Tanto la víctima como el supuesto agresor, que compartían un hijo, son de nacionalidad española. El suceso ocurrió sobre las 9.30, cuando la mujer regresaba de dejar en el colegio a sus hijos. Tras perpetrar el crimen, el agresor, que portaba un hacha y un cuchillo, fue retenido por varios vecinos, que lo increparon hasta la llegada de la policía. Residentes en la zona aseguraron entonces que el detenido llevaba "varios días" rondando el domicilio de la fallecida, en la misma zona del este de Málaga. La víctima no tuvo acceso a teleasistencia porque el informe policial, de julio de 2010, que se adjuntó a su petición estimaba que el riesgo de sufrir una agresión era "bajo".

22 de febrero. Montserrat M.

La hija de Montserrat M (44 años y española) de cinco años fue quien encontró a su madre fallecida y quien avisó de la muerte de la progenitora, que recibió una puñalada en la espalda, cuando tras pasar la noche con el cadáver en el domicilio, acudió sola al colegio, donde explicó a los profesores lo sucedido. "Mi madre está muerta, la ha matado su pareja", dijo a la primera empleada que encontró en el centro, según contaron otras compañeras después. Su agresor tenía una condena por maltrato y una orden de alejamiento dictada en 2006 que no se respetaba, motivo por el cual había sido detenido en una ocasión. Ambos convivían, pese a todo, en una relación jalonada de peleas. El suceso ocurrió en Reus. La víctima había pedido una semana antes, el 16 de Febrero, a la Guardia Urbana de Reus que revocara la orden de alejamiento que pesaba sobre su compañero sentimental y supuesto autor del crimen.

23 de Febrero Carlin Ruiz

Al día siguiente, el 23 de febrero, otra mujer falleció en Valencia a manos de su pareja. Carlin Ruiz, boliviana de 32 años, murió a manos de su compañero sentimental, un hombre de 74 y de origen uruguayo. La acuchilló en el domicilio que compartían. Fue él mismo el que acudió a la policía para denunciar el suceso. No existía ninguna denuncia contra el agresor. Aunque poco después se descubrió El septuagenario encarcelado tras matar a cuchilladas a su compañera sentimental en Valencia llevaba años maltratándola y acosándola.

7 de marzo. Marylin Wilson

Vicente S. (57 años) mató a su pareja Marylin Wilson de 52 dos días antes de que se celebrara el juicio por su separación. La mató a cuchilladas. El suceso ocurrió a primera hora de la mañana, a las ocho justo cuando la mujer regresaba a su domicilio en Fuente el Saz del Jarama, en Madrid. Como noches anteriores había dormido en casa de su hija por miedo de que acudiera su expareja y la agrediera ya que las dos viviendas estaban a muy poca distancia. Su atacante se ocultó en el lateral de la vivienda, junto unos setos. Fue atacada en el momento en que iba a abrir la puerta de la valla. Se inició una discusión y un forcejeo entre ambos, en el que la mujer intentó zafarse de su agresor, pero este sacó un arma blanca (supuestamente un cuchillo) y le asestó al menos tres puñaladas. Una le alcanzó el hemitórax izquierdo y las otras dos el abdomen, La mujer ya había denunciado el verano anterior los malos tratos sufridos por parte de su pareja, dónde consiguió una orden de alejamiento. El hombre la había incumplido en dos ocasiones.

21 de marzo. N. C. C.

Un hombre de 62 años fue detenido en Granada tras confesar a la Policía Local que había matado con un cuchillo de cocina a su esposa, N.C.C de 62 años, quien fue hallada muerta en la vivienda de la pareja poco antes de las diez de la mañana del 21 de marzo. El suceso fue advertido por el supuesto autor del homicidio, un antiguo policía, quien salió de su casa y confesó a una pareja de la Policía Local que se hallaba en la zona tomando café en un bar. La mujer no había presentado ninguna denuncia previa contra su pareja ni solicitó los recursos que ofrece la Junta de Andalucía para atender a la mujeres víctimas de malos tratos. Sí se había desplazado en varias ocasiones al IAM para pedir asesoramiento jurídico, porque su intención era "divorciarse" de su pareja, de la que no informó en ningún momento que la maltratara.

22 de marzo. P.A.V.

P.A.V de 44 años fue hallada muerta con una puñalada en el cuello en la localidad jienense de Torre del Campo. La Guardia Civil encontró el cuerpo en la vivienda de su ex compañero sentimental, que fue el que llamó. La mujer tenía prohibido acercarse a su agresor, ya que existía una orden de alejamiento a favor de él, pese a lo cual se encontraba en el domicilio del ex compañero. El cadáver de la mujer, P.A.V, fue encontrado con una puñalada en el cuello, que le causó la muerte. El excompañero de la mujer fue el que ha llamado al 112 para comunicar que había agredido a la víctima. Al llegar los agentes a la casa, lo detuvieron sin resistencia.

4 de abril. Yanela Z.C.

El cadáver de Yanela Z.C., una joven ecuatoriana de 22 años, fue encontrado semisumergido en la Laguna de la Morea (Navarra) por un vecino que paseaba por la zona, presentaba signos de violencia y graves heridas en el cuello. La mujer vivía en Burlada, localidad muy cercana a Pamplona. Se trató de un crimen por estrangulamiento. La joven ecuatoriana y madre de tres años desde hacía tan solo dos meses, cuando rompió con su pareja y padre de su hijo y volvió a casa de sus padres. . No constaba ninguna denuncia de la mujer contra el supuesto agresor ni tampoco asistencia por parte de los servicios sociales.

4 de abril. Viorela Alexandra Moldovan

Viorela Alexandra Moldovan, de 19 años fue asesinada a manos de su compañero sentimental. Dorel Marcu, de 21 años, la ahogó y habló mediante videoconferencia a través de Internet con su padre (de él) en su país natal. Le mostró el cuerpo de la víctima y le dijo que cuando llegara su cuñada, de 13 años, la mataría también. La coordinación entre las policías rumanas y española permitió su detención en 45 minutos, lo que evitó un nuevo crimen según los investigadores. Dorel y Viorela Alexandra se conocían hacía unos cinco años. Ambos son oriundos de Transilvania, en el centro de Rumanía. Habían llegado a Torrejón de Ardoz (118.450 habitantes) a casa de la madre de ella. Desde entonces, la mujer les había visto discutir con frecuencia, según comentó ayer: "Mi hija era muy infeliz. Yo hablaba con los dos para ver cómo les podía ayudar pero nunca me metía en las discusiones. Ellos se encerraban en su habitación y ahí no me metía", explicó su madre con lágrimas en los ojos”.

13 de abril. Mireia Roma Blasco

Mireia Roma Blasco fue el primer caso del año 2011 que se dio en la provincia de Alicante y fue especialmente dramático. La mujer de 29 años fue asesinada en Mutxamel por su marido de 45. Recibió nueve puñaladas mortales antes de que su agresor prendiera fuego el ático en el que residía con Roma Blasco y sus dos hijos. El cuerpo de la víctima resultó calcinado. La pareja se encontraba en trámites de separación pero todavía convivían bajo el mismo techo. No existía entre la pareja denuncias previas por malos tratos. El matrimonio tenía dos hijos, de 1 y 5 años, a

24 de abril. Desconocida

Johnny B. A., de 32 años y de nacionalidad boliviana, fue detenido en Santa Coloma de Gramenet (Barcelona) por los Mossos d'Esquadra por su presunta relación con la muerte de su pareja, cuyo cadáver apareció bajo el puente del Molinet de esa ciudad. La detención se produjo después de que la policía autonómica recibiera una llamada sobre la una de la madrugada advirtiendo de la presencia del cadáver. La mujer pudo ser despeñada por el puente tras una discusión entre la pareja. Un grupo de jóvenes que se encontraba en las inmediaciones del puente cuando sucedieron los hechos explicaron que presenciaron la bronca, en una zona frecuentada por ciudadanos de nacionalidad boliviana. Los testigos aseguraron que después del incidente el detenido "se escondió detrás de un poste" hasta que le encontró la policía, y añadieron que "estaba muy bebido".

6 de mayo. Cándida Serrano

Cándida Serrano, de 71 años, vivía con miedo a su expareja. Había dicho a sus amigas que su marido, Joan Tirado, del que se había separado hacía unos meses, iba a por ella. Sobre él pesaba una orden de alejamiento, lo que no evitó que los temores de la mujer se hicieran realidad. Tirado, de 76 años, llegó a las 8.10 a la casa donde vivía Serrano, en el centro de Bescanó (Girona). Salió apresurado del coche, entró en la vivienda unifamiliar (la puerta estaba abierta porque la mujer esperaba a un albañil) y le pegó dos tiros a su expareja: uno en la cabeza y otro en el pecho. A Serrano la encontraron dos vecinas en el suelo de la cocina y cubierta de sangre. Los Mossos d'Esquadra detuvieron al hombre poco después en Anglès, a unos 10 kilómetros del suceso, donde vivía con una de las hijas de la pareja.

8 de mayo. Marisol Consuelo

Marisol Consuelo T. C., de 40 años, murió degollada por su marido, Segundo Eulogio C. P., de 39 años, en el distrito madrileño de Puente de Vallecas. Alrededor de las cinco de la tarde los vecinos vieron cómo la mujer se asomaba a la ventana y pedía auxilio. Instantes después y sin que la víctima pudiera hacer nada, su marido la cogió del brazo y la metió bruscamente para la habitación. Acto seguido, bajó la persiana para que nadie viera lo que ocurría tras las cortinas. Las personas que estaban en la calle y algunos residentes llamaron a los servicios de emergencia. Al lugar acudieron dos dotaciones de la Policía Municipal de Madrid, que avisaron a los bomberos. Estos se encargaron de tirar abajo la puerta blindada de la vivienda. Mientras lo hacían, oían al hombre en el interior del piso. Cuando la policía logró entrar, encontraron a la mujer tirada en el salón en medio de un charco de sangre con el cuello seccionado. Murió prácticamente en el acto. No había denuncias previas en el matrimonio. Tampoco existían órdenes de alejamiento ni otras medidas cautelares. Algunos vecinos explicaron que el matrimonio tenía dos hijos (un chico de unos 12 años y una niña de alrededor de cinco) y que residían en el piso desde hacía unos dos años.

8 de mayo. A.E.L

Un hombre de 42 años asesinó a A.E.L. en Almería de 20 puñaladas. V. F. C., esperó tranquilamente a la víctima, de 30 años, cerca de la vivienda que ambos compartían hasta hace un mes, antes de iniciar los trámites de separación como pareja de hecho. Cuando la mujer salió a pasear al perro, sobre las 10 de la mañana, murió. Mientras los equipos de emergencia trataban de salvar la vida de la víctima, el supuesto asesino estaba sentado en un banco próximo al lugar del crimen retenido por un vecino quien, según varios testigos, impidió que huyera. El hombre confesó a los agentes que la noche anterior había tenido una fuerte discusión con su expareja por un asunto relacionado con la primera comunión de una de sus hijas. La pareja, que hasta el mes pasado compartía vivienda en el barrio de Ciudad Jardín, tenía dos hijas en común, de 9 y 7 años. La víctima no denunció nunca por violencia de género.

13 de mayo. GLORIA G.

Gloria G. de 19 años murió como consecuencia de las puñaladas recibidas en su casa de la localidad coruñesa de Noia. La joven fue encontrada aún con vida por un hermano suyo, que fue quien dio aviso a los servicios de emergencia. La chica presentaba numerosas cuchilladas en pecho y abdomen. Las profundas heridas que presentaba el cuerpo de la víctima eran "de una violencia extrema".

15 de mayo. Desconocida

La víctima, una mujer ecuatoriana de 29 años, fue asesinada. La Policía Nacional apuntó que la causa de la muerte de la mujer fue el desangramiento, pues tenía un corte profundo en el cuello y ningún otro signo externo de violencia. Su cadáver fue hallado en el camino de la Miel (Córdoba), en las inmediaciones del polígono industrial de La Torrecilla, por un viandante que rápidamente telefoneó a los servicios de emergencias.

30 de mayo. Rosa G. M.

El cadáver de Rosa G.M., de 28 años, apareció con signos de violencia en un paraje del municipio de Tabernas, a unos 50 kilómetros de Fines (Almería), donde había desaparecido días atrás. Su exmarido, Óscar P.F, de 34 años, fue detenido el como principal sospechoso. Estaban separados desde hacía casi dos años y tenían en común una hija de cinco años. La víctima no había presentado denuncias por malos tratos, pero los testimonios de familiares, amigos y vecinos apuntaron directamente al detenido.

31 de mayo. Maren Mendia Blanco Canales

"Acabo de apuñalar a mi mujer. Ya no respira". Así informó Víctor Manuel Pérez Mesón, de 42 años, al operador del teléfono de emergencias 112 del crimen que, supuestamente, acababa de cometer. Cuando llegaron los policías locales, hallaron a su exesposa, Maren Mendía Blanco Canales, de 41 años, tendida en el salón de la vivienda con al menos cuatro cuchilladas. El hombre, que fue detenido de inmediato, ingresó en el servicio de urgencias del hospital de la localidad, ya que pudo haberse autolesionado. El matrimono llevaban viviendo unos siete años en un chalé de Móstoles (Madrid). La relación entre ambos se había deteriorado en los últimos meses. Hace unos 20 días habían recibido la sentencia de divorcio, pero seguían residiendo juntos tras el fallo judicial. Las compañeras de trabajo de la fallecida aseguran que la mujer había denunciado otra agresión.

1 de junio.

Inés Álvarez, de 64 años, falleció en la localidad mierense de Valdecuna (Asturias) tras presuntamente ser atacada con un hacha por su marido, C.V.G., de 72 años. El hermano del presunto agresor dio la voz de aviso después de ver a su hermano ensangrentado a la puerta del domicilio familiar, por donde pasaba casualmente con su coche. Los agentes hallaron el cuerpo sin vida de la mujer en la cocina de la casa y detuvieron al marido. La fallecida no había solicitado ninguna orden de protección ni existían denuncias previas por malos tratos, según la Guardia Civil.

1 de junio. Desconocida

Un matrimonio fue encontrado muerto en Museros (Valencia) y según todos los indicios, el marido, de 79 años, habría matado con una navaja a su mujer, de 82, antes de suicidarse de un tiro en la cabeza con un viejo revólver. La fallecida no había denunciado, las vecinas aseguran que sufría amenazas.

16 de junio. Desconocida

Una mujer de 31 años falleció en Durango (Bizkaia) tras caer desde una ventana. Las autoridades pensaron al principio que se trataba de un suicidio, pero finalmente fue detenido su novio.

3 de julio. Rosario Román

Rosario Román, de 55 años, murió por heridas de arma blanca en la céntrica calle Izpizua de Hernani (Guipúzcoa), en un ataque en el que también resultó herida su hija, de unos 30 años. Una joven que acompañaba a madre e hija en el momento de los hechos relató que ambas se disponían a coger un taxi para regresar a su casa, cuando vieron a la expareja de la fallecida, tumbado en un banco de la calle. El hombre, que tenía antecedentes por malos tratos, se les acercó y, presuntamente, las agredió. La policía lo detuvo poco después.

3 de julio. A. P. C. T.

A. P. C. T., de 28 años, fue presuntamente estrangulada por su pareja, L.E.C.S, de 30 años, en un piso de la avenida zaragozana de San José. Fue el hijo de la pareja, de 10 años, quien alertó a un familiar de la víctima de que había oído discutir a sus padres, ambos de nacionalidad ecuatoriana. La mujer no había interpuesto denuncia previa por malos tratos. El hombre fue detenido como presunto autor de los hechos.

4 de julio. . E. C. S.

E. C. S., una boliviana de 29, murió en su domicilio de Barcelona tras ser apuñalada por su pareja, F.C.. El hombre, de 28 años, avisó de lo sucedido a la policía con una llamada telefónica y después trató de suicidarse utilizando el mismo cuchillo, según informaron fuentes policiales. El presunto agresor, que ya tenía antecedentes por violencia machista, fue trasladado al hospital en estado muy grave.

16 de julio. Julia Figueroa P.

Julia Figueroa, una boliviana de 30 años fue estrangulada presuntamente por su marido y arrojada después a un huerto de naranjos de la Masía de Furriol, en la localidad valenciana de Chiva. El hombre confesó el crimen ante la jueza e ingreso en prisión. No era la primera vez que se las tenía que ver con la justicia. La mujer interpuso una denuncia contra él por malos tratos y pidió una orden de protección, pero la rechazó en 2009. También se negó a declarar contra su pareja. Tenían en común un hijo de ocho años.

19 de julio. Mónica C. R.

Mónica C.R., de 18 años, falleció en Otura (Granada) al recibir una paliza. Su novio, de 20 años, fue arrestado tras trasladar a la joven al Hospital Clínico de Granada. La víctima presentaba fuertes golpes e ingresó ya sin vida en el hospital. El detenido aseguró que ambos, él y su novia, recibieron una paliza en las inmediaciones de su vivienda cuando iban a subirse a un coche y que no recordaba más.

2 de agosto.

Fructuosa López fue presuntamente asesinada por su marido, Julián Romero, de 71 años, en el domicilio del barrio madrileño de Vallecas donde convivían desde hacía 50 años. Los vecinos aseguran que aquella tarde les habían oído gritar y discutir. El hombre asestó varias puñaladas a su mujer y luego se suicidó, según recoge el informe forense. El cadáver de él tenía una puñalada en el corazón y todavía empuñaba en una mano un cuchillo. Ella presentaba cortes en los brazos, señal de que había intentado defenderse, y un profundo tajo en la nuca. No había antecedentes por malos tratos, ni denuncias ni órdenes de alejamiento.

5 de agosto. Rosa María Torres

Rosa Torres, de 31 años, estuvo desaparecida durante dos meses y 21 días hasta que apareció su cadáver en una zona boscosa de la localidad de Castellbisbal (Barcelona). Poco después de la desaparición, la policía halló el coche de esta mujer abandonado en un polígono industrial de Sabadell con restos de sangre en su interior. El marido de la víctima fue detenido por los Mossos d'Esquadra como principal sospechoso y el juzgado de violencia doméstica de Sabadell decretó su ingreso en prisión provisional por un presunto delito de homicidio.

8 de agosto. Giovanna Silva da Faria

Semienterrada y con varias heridas por el cuerpo. Así fue encontrada muerta Giovanna Silva da Faria junto al embalse de El Atazar. La brasileña, de 38 años, había convivido durante los últimos días de su vida con su exmarido, el madrileño Manuel Antonio G. A. S., de 51 años, quien fue detenido horas después del hallazgo del cuerpo, acusado de un delito de homicidio y otro de quebrantamiento de condena por desobedecer la orden de alejamiento de Giovanna que le había impuesto un juez.

22 de agosto.

Deisy Mendoza, una mujer ecuatoriana de 36 años, murió apuñalada por Hector, su expareja, en su domicilio en una céntrica calle de Bilbao. El hombre, de 38, ya la había apuñalado en varias ocasiones y sobre él pesaba una orden de alejamiento. Eran padres de tres hijos -dos chicas y un chico, de entre 13 y 18 años- y se habían separado meses atrás tras una convivencia de dos décadas. Aquella tarde tuvieron una fuerte discusión y un vecino alertó a los servicios de emergencia. Aún estaba viva cuando la encontraron, pero los sanitarios no pudieron reanimarla. La Ertzaintza detuvo al agresor en el lugar del crimen, el rellano del tercer piso del edificio.

26 de agosto. Caridad E.P.

Un hombre de 71 años se arrojó a las vías del tren a su paso por una pedanía de Murcia. La Policía y la hija del matrimonio no consiguieron localizar por teléfono a la mujer del fallecido para notificarle lo que, inicialmente parecía un accidente ferroviario, y así fue como descubrieron el cadáver de Caridad E.P. en su domicilio del barrio murciano del Infante. No había denuncias previas por maltrato, ni órdenes de alejamiento dictadas contra el marido de la víctima y el presunto agresor no tenía antecedentes penales, pero fuentes de la investigación han confirmado a través de la familia que el hombre le había pegado en numerosas ocasiones y había amenazado con matarla y tirarse a la vía del tren con la intención de "salir en todos los periódicos".

29 de agosto. I.V.S.

: I. V. S. , de 49 años, fue apuñalada presuntamente por su marido, D. V. J., en el ascensor del edificio de la vivienda conyugal. Tras la agresión, que se produjo en el primer sótano del inmueble, el agresor, de 54 años, salió del edificio y se acercó a un bar cercano, donde confesó a varios familiares que se encontraban en el establecimiento que había matado a su esposa. La Policía Nacional detuvo al presunto agresor poco después del suceso e informó de que la víctima no había interpuesto contra él ninguna denuncia por malos tratos. El matrimonio estaba en trámites de separación.

15 de septiembre. Esther Ortí J.

Esther Ortí, de 47 años, salió a comprar a escasos metros de la vivienda donde residía en Vinarós (Castellón) y estuvo desaparecida durante tres días. Su cadáver fue emparedado en una caseta de campo situada en una finca de la localidad tarraconense de Amposta. La parcela es propiedad de su marido, por lo que la Guardia Civil detuvo un hombre por la presunta implicación en la muerte de Ortí. Hacía quince años que se habían casado.

17 de septiembre.

Lucía M, de 47 años y con dos hijos, se disponía a coger un tren para Sevilla con sus amigas, cuando vio a su expareja en la estación. Nunca cogió ese tren. Su antiguo compañero le asestó varias puñaladas con un cuchillo hasta matarla, muy cerca de la estación de Lora del Río, localidad donde ambos habían convivido. La mujer había presentado una denuncia por amenazas en la Guardia Civil el verano pasado, pero rechazó las medidas de protección. Tras el ataque, el agresor, de 44 años e iniciales J. J. S., huyó en su coche, aunque después se entregó a los agentes y confesó el crimen.

19 de septiembre. Clementina M.G.

Clementina M.G, de 38 años, falleció en Arona tras ser presuntamente apuñalada por su marido, Luis Domingo M.A., de 54 años, quien presentaba heridas por arma blanca en tórax y abdomen al, supuestamente, intentar quitarse la vida. El presunto agresor llamó al hijo adolescente de la pareja y el alertó a los servicios de emergencia. Al llegar, los médicos solo pudieron confirmar la muerte. La víctima no había presentado denuncias ni existía orden de alejamiento.

21 de septiembre. C.F.L.

C.F.L., una mujer de 71 años, murió en Cádiz tras pasar doce días ingresada en coma con un traumatismo craneoencefálico. La víctima mantuvo una discusión con su marido, José G. P., de 72 años,, en su domicilio de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) y en un momento de la pelea éste le empujó, ella cayó por las escaleras y se golpeó la cabeza con uno de los peldaños. Su pareja reconoció los hechos y fue detenido. La anciana no había presentado jamás denuncia contra el presunto agresor ni se conocían antecedentes de malos tratos en la pareja.

22 de septiembre. Mina

Mina, una mujer marroquí de 39 años murió en Puçol (Valencia) presuntamente a manos de su marido, de 62 años y nacionalidad española. La víctima denunció por malos tratos a su esposo en agosto. El juez lo condenó a 30 días de trabajos para la comunidad y le impuso una orden de alejamiento. La mujer disponía de un dispositivo de protección que activó minutos antes de ser atacada. La reacción de la policía local no pudo evitar, sin embargo, que su marido la apuñalara repetidamente en la peluquería que regentaba en Puçol, una población de 19.000 habitantes situada a 20 kilómetros al norte de Valencia.

27 de septiembre. Salud García

Salud García, de 41 años y vecina de la Puebla de Vícar, ha muerto apuñalada esta mañana. El compañero de la fallecida, un hombre de 43 años cuyas iniciales son F. J. G., ha sido detenido por la Policía Local de esta población de Almería. La mujer presentaba heridas de arma blanca, según confirmaron fuentes de la Guardia Civil. La pareja tiene una hija adolescente en común que en el momento del crimen no se encontraba en la vivienda. No existen denuncias previas por malos tratos, aunque la mujer había pedido asesoramiento legal para iniciar los trámites de separación.

8 de Octubre. Desconocida

Un hombre de 80 años, belga, fue detenido como presunto autor de la muerte de su esposa, de 78 años y la misma nacionalidad, en Calpe (Alicante). La Guardia Civil recibió una llamada de una persona que aseguraba que su padre le había llamado por teléfono contándole que había matado a su pareja. Un grupo de agentes se desplazó al domicilio y el hombre les abrió la puerta. Encontraron a la mujer tendida en el suelo, con un fuerte golpe en la cabeza, y avisaron a urgencias, pero no se logró reanimarla. El marido necesitó asistencia por unas heridas aparentemente causadas por él mismo con la intención de suicidarse, pero dichas lesiones no eran de gravedad. La víctima no había interpuesto ninguna denuncia por violencia machista contra el presunto autor del crimen.

11 de octubre. Cristina González Sauca

Un hombre de 41 años mató ayer a su mujer, de 39, a cuchilladas en el domicilio familiar, situado en una parroquia pontevedresa. La policía encontró el cadáver de la mujer, boca abajo, en el pasillo y el arma homicida - un cuchillo de cocina-, después de que el presunto agresor acudiera a la comisaría de Vigo para confesar su crimen. El hombre había abandonado recientemente el domicilio familiar, tras iniciar los trámites para su separación. No constan antecedentes por denuncias de violencia machista contra él. La pareja tenía dos niños, de 13 y 8 años, ausentes en el momento del crimen.

12 de octubre. Desconocida

Una mujer de nacionalidad italiana de 36 años falleció en Puerto del Carmen, en el municipio de Tías (Lanzarote), tras ser asfixiada con un cable presuntamente por su pareja, un varón de origen senegalés. El presunto agresor, de 30 años y en situación irregular, acudió a la comandancia de la Guardia Civil en Puerto del Carmen para confesar los hechos, ocurridos en el domicilio conyugal. La Guardia Civil, encontró el cuerpo sin vida de la mujer tendido en la cama y, junto a ella, a una niña de cinco años. Era hija de la pareja, que convivía desde hacía cinco años.

13 de octubre. A.C.G.

E.A.P.T., de 30 años y nacionalidad portuguesa, asesinó presuntamente a su pareja, A.C.G., de 29 años y nacionalidad española en el domicilio donde convivían en Avilés (Asturias). Lo hizo a golpes, durante una discusión, según ha informado la Policía Nacional. El hombre entró muy nervioso en un bar poco antes de las dos de la madrugada y confesó al camarero, al que conocía, que le parecía que había matado a su pareja. La víctima no había interpuesto ninguna denuncia por violencia machista contra su novio, si bien este ya había sido detenido por malos tratos a una pareja anterior.

18 de octubre. Eunice Agbontaen

La nigeriana Eunice Agbontaen, de 38, años falleció después de dos días hospitalizada. Su pareja, Bernard A., supuestamente le disparó ocho tiros con un arma corta. Los Mossos d'Esquadra detuvieron al hombre, de 48 años y nacionalidad francesa, por un intento de homicidio. La pareja vivía con dos niños que, según fuentes cercanas al caso, estaban en la vivienda a la hora del suceso. Bernard A., corpulento y de una altura cercana a los dos metros, alegó durante la reconstrucción del crimen que había consumido cocaína, que estaba ofuscado y que no disparó directamente contra su esposa, sino que lo hizo a oscuras dentro del baño. La víctima no había presentado ninguna denuncia contra él por malos tratos, según informaron los Mossos d'Esquadra.

24 de octubre. Nuria Orol Sarabia

El cadáver de Nuria Orol Sarabia fue hallado con cuatro puñaladas en el tórax y el pecho, tendido en el suelo de su apartamento del Puerto de Andratx, en la isla Mallorca. Trabajadora -en paro- de establecimientos del sector turístico de la zona, tenía 24 años, era de nacionalidad española y madre de dos hijos, un niño y una niña de siete y dos años. Esta última estaba presente en la casa cuando aconteció el suceso. La guardia civil detuvo como sospechoso de un supuesto crimen de violencia machista a la antigua pareja de Nuria, Zouhair H, de 37 años, nacido en Marruecos. La víctima no había denunciado al presunto agresor, a pesar de que en los archivos judiciales consta que en septiembre fue atendida en un centro salud por lesiones sospechosas de haber sido causadas por una agresión, y que los médicos, de acuerdo con el protocolo, comunicaron el hecho para su investigación penal al juzgado de guardia.

3 de noviembre. Sabrina Cortés Carpintero

Una brasileña de 29 años muere apuñalada en su piso de Alcorcón. La víctima fue hallada por su empleada de hogar en la entrada de la vivienda. La mujer estaba tendida en el suelo, ya sin vida y con varias puñaladas, en medio de un gran charco de sangre. La forma en que fue hallada y el hecho de que abriera la puerta de su vivienda hacen pensar a la policía que el homicida es una persona conocida o al menos a la que esperaba. Los agentes de Homicidios confirmaron que su marido se encuentra en prisión cumpliendo condena por un delito de tráfico de drogas, pero la semana anterior al hallazgo del cuerpo tuvo un permiso de cuatro días que pasó junto a su mujer. El crimen pudo cometerse el domingo o el sábado, ya que durante el fin de semana varios vecinos vieron manchas de sangre en el rellano de su piso y en el ascensor. La mujer no había presentado ninguna denuncia contra él por malos tratos, aunque según sus amigos sufría malos tratos psicológicos. La pareja firmaba los papeles del divorcio ese día.