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El matrimonio homosexual se abre paso en la América profunda

El Supremo de Iowa anula la ley que impedía el enlace a gays y lesbianas

Los defensores de los derechos de los homosexuales consiguieron ayer, por la vía judicial, un triunfo no esperado en el corazón del Medio Oeste norteamericano. Hasta ahora, el debate sobre la legalidad del matrimonio gay se mantuvo en las dos costas de EE UU, de tendencia más progresista. Ningún Estado del interior había permitido el matrimonio gay. Pero Iowa ha roto la tendencia, y se convirtió ayer en el tercer Estado norteamericano en legalizar el matrimonio homosexual, tras Massachusetts y Connecticut. En una sentencia unánime, el Tribunal Supremo declaró inconstitucional una ley de 1998 que establece que el matrimonio es la unión de un hombre y una mujer.

"El principio constitucional que subyace en este caso es el de la protección de la igualdad", dice el Supremo en su sentencia, en la que equipara la aprobación del matrimonio gay a "las victorias contra la esclavitud y la segregación y el reconocimiento de los derechos de las mujeres".

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La medida será efectiva en el plazo de 20 días. A los oponentes les queda una opción que ya han aplicado al menos otros seis Estados del Medio Oeste, como Misuri o Kansas: prohibir las uniones gays a través de una enmienda constitucional.

"Creo que el matrimonio debe ser la unión de un hombre y una mujer", dijo ayer el senador estatal republicano Paul McKinley. "Estoy seguro de que la mayoría de ciudadanos de Iowa quieren un matrimonio tradicional".

Cuando el Supremo de California aprobó el matrimonio homosexual en mayo de 2008, un grupo de ciudadanos pidió que se sometiera a votación una enmienda a la Constitución que definiera el matrimonio gay como la unión de un hombre y una mujer. Con el apoyo de grupos religiosos evangélicos y mormones, esta enmienda, conocida como Proposición Ocho, fue aprobada el 4 de noviembre con un 52% de los votos.

La aprobación del matrimonio gay en Iowa puede ser decisiva por la influencia que puede ejercer en otros Estados del corazón de Norteamérica. En Illinois, Minnesota y Wyoming existen leyes que prohíben las uniones del mismo sexo, aunque sus Constituciones garantizan la igualdad de todas las personas ante la ley sin ninguna enmienda que ilegalice las uniones homosexuales.

La decisión del Supremo de Iowa aplica a todo el Estado una sentencia del juez del condado de Polk, que en 2007 aprobó el matrimonio entre personas del mismo sexo. Entre 2005 y 2006, diversas parejas homosexuales de Polk solicitaron casarse, pero el registrador del condado, Thimoty Brien, se negó a adjudicarles licencias de matrimonio ya que la ley de 1998 prohibía las uniones homosexuales. Seis de ellas llevaron el caso hasta el juez del condado, que falló en su favor. Esta sentencia llegó al Supremo el año pasado, y ha acabado legalizando el matrimonio gay en todo el Estado.

"Hemos esperado 18 años a que llegara este momento", dijeron ayer dos de las demandantes, la pareja formada por Jen y Dawn BarbouRoske, en un comunicado. "Hemos erigido una vida y un matrimonio juntas. El matrimonio es la única palabra que describe nuestro compromiso mutuo y nuestra familia".

Parejas de lesbianas celebran la decisión del Supremo de Iowa que les permite casarse.
Parejas de lesbianas celebran la decisión del Supremo de Iowa que les permite casarse.AP

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