Reducir la ingesta de comida alarga la vida de los primates
Hallado el primer fármaco antiedad efectivo en ratones
La restricción calórica -comer un 30% menos de lo normal sin descuidar ni un nutriente esencial- es el método mejor conocido para alargar la vida de las levaduras, los gusanos, las moscas y los ratones. Aún falta demostrar que el método funciona en humanos, pero desde hoy se puede considerar probado que sí lo hace en macacos. Un equipo de la Universidad de Wisconsin y del Centro Nacional de Investigación con Primates, ambos en Madison, publican hoy los datos en la revista Science.
El estudio empezó en 1989, cuando los expertos dividieron en dos grupos a sus macacos rhesus y recortaron la dieta del primer grupo en un 30% (durante 20 años). Los monos del grupo control comieron lo normal para un macaco rhesus. Al final, el 37% del segundo grupo se habían muerto de viejos, es decir, de enfermedades asociadas a la edad: diabetes, cardiovasculares, cáncer y degeneración neuronal. En el grupo sometido a restricción calórica sólo había muerto el 13%.
En un estudio distinto publicado ayer en Nature, científicos norteamericanos han hallado el primer fármaco capaz de prolongar la vida de un mamífero, el ratón en este caso. Es el primer éxito Intervention Test Program, un plan sistemático de los Institutos Nacionales de la Salud de EE UU para buscar fármacos antiedad entre los que ya están en uso. El fármaco es la ripamicina, un inmunosupresor utilizado en pacientes que han recibido un trasplante. Los ratones la empezaron a tomar a una edad avanzada, y el tiempo que les quedaba de vida se alargó un 28% (en los machos) y un 38% (en las hembras).
"Estos efectos son similares a los que tendría en el ser humano prevenir todas las muertes por aterosclerosis y todas las muertes por cáncer", explica a EL PAÍS David Harrison, el principal autor del estudio. Los ratones empezaron a tomar la ripamicina cuando tenían 600 días de edad, "más o menos equivalente a una persona de 60 años", calcula Harrison. En un país occidental esa persona espera vivir otros 25 años como promedio. Si los resultados pudieran extrapolarse, la rapamicina le regalaría otros 7 años al hombre y 10 a la mujer.
Muchas personas trasplantadas han tomado rapamicina para evitar el rechazo de su nuevo órgano. ¿Hay alguna evidencia de que eso haya retrasado su envejecimiento? "¡Espero que un demógrafo cualificado haga ese estudio!", responde el científico.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.