RTVE cierra su primer año sin anuncios con 47 millones de déficit
La corporación discrepa de las liquidaciones de las privadas y las 'telecos'
El fin de la publicidad ha tenido efectos positivos en la audiencia de TVE y aparentemente desastrosos en sus finanzas. Con la decisión del Gobierno de suprimir radicalmente los anuncios desde el 1 de enero de 2010, dejó de ingresar alrededor de 400 millones de euros. Para compensar estos recursos (que se esfumaron de un año para otro con la nueva ley de financiación), RTVE esperaba recaudar fondos suficientes a través de las tasas impuestas a las privadas (el 3% de sus ingresos anuales en los canales en abierto y el 1,5% en los de pago) y a los operadores de telecomunicaciones (0,9%).
Pero una sucesión de errores de cálculo, unido a discrepancias en las liquidaciones de estas compañías han arrastrado RTVE hacia los números rojos. El ejercicio 2010, el primero libre de anuncios, ha cerrado con un déficit de 47,1 millones de euros. El presidente de RTVE, Alberto Oliart, tenía la fórmula para evitar estas pérdidas: vender los derechos del Mundial de Motociclismo a Telecinco por 40 millones. Pero este plan fue rechazado de plano por el consejo de administración.
El Ministerio de Industria erró en la recaudación de la tasa radioeléctrica
Después de ajustar todas las partidas y echar números sobre los resultados de las cadenas privadas y de las telecos, RTVE concluye que deberían haber entrado en sus arcas 62,3 millones más. No solo no está conforme con las autoloquidaciones (278 millones en conjunto) sino que, según sus cálculos, las televisiones les adeudan 19,2 millones y las telecos, 43,1. Fuentes del grupo señalan que algunas cadenas han computado los ingresos netos en lugar de los brutos y que las telecos no han contabilizado correctamente el servicio de telefonía móvil. La Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones ha comenzado a revisar las declaraciones de estas empresas y, de momento, ya ha reclamado a las cadenas comerciales 4,9 millones de euros correspondientes al último cuatrimestre de 2009 (ese año las telecos no estaban obligadas a pagar).
De haber recibido esos 62,3 millones, el balance de RTVE no habría sido negativo sino positivo. Incluso le habrían sobrado unos 19 millones. Si finalmente RTVE recibe aquellas cantidades, la cuestión es si Hacienda permitirá que sirvan para enjugar las pérdidas de 2010. El consejo de administración acordó ayer buscar "fórmulas técnicas" con un objetivo: que si se cobran este año sirva para compensar el desequilibrio del anterior.
Pero el gran desfase sobre los 1.200 millones de euros presupuestados (579 inyectados por el Estado) se ha producido en la tasa radioeléctrica. La ley cedía a RTVE el 80% de este impuesto (equivalente a 330 millones, según estimaba el Ministerio de Industria). Error de cálculo. La realidad ha rebajado esa cifra a 250,4 millones. Además, RTVE ha devuelto al Estado tres millones de la subvención comprometida. El director general corporativo de RTVE, Jaime Gaiteiro, explicó ayer que este reintegro obedece a los ingresos derivados del patrocinio que acompaña a determinados derechos deportivos, como la Liga de Campeones.
Gaiteiro subrayó que en 2010, RTVE ha ahorrado en la compra de contenidos y ha aumentado las ventas de sus productos. "En lo que hemos tenido capacidad real hemos gastado menos e ingresado más".
Para recortar aún más los gastos, el consejo acordó ayer pactar con Mediapro, por contrato, la utilización de trabajadores y unidades móviles propias en Cataluña, Canarias y Madrid para la producción de España directo. El PP votó en contra de la renovación del contrato y CiU se abstuvo.
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