La estrategia de UPyD favorece al PP
De no lograr sus reivindicaciones, su plan beneficiaría a la lista más votada
Unión Progreso y Democracia (UPyD) no está dispuesta a dejar pasar su primera gran oportunidad de hacerse oír. Con la llave de gobierno en una decena de municipios de la región -y 26 en total en el conjunto de España-, la formación liderada por la diputada nacional Rosa Díez no tiene prisa en despejar la incógnita que mantiene en vilo a populares y socialistas de importantes ciudades madrileñas como Getafe, Alcalá de Henares y Coslada.
Su oferta a los dos partidos mayoritarios es clara: quiere obtener su compromiso para reformar la Ley Electoral y devolver las competencias de Educación al Gobierno central. Y no le importa no mover ficha hasta el próximo 11 de junio, cuando se celebran las sesiones de investidura municipales.
La formación de Aguirre podría hacerse con nueve Ayuntamientos
La reunión de ayer de su consejo de dirección, en la que se suponía que se despejarían las dudas, no sirvió sino para reafirmar su pulso con el PP y el PSOE. Díez aprovechó en cualquier caso para advertir a los populares de que los socialistas ya han dado al parecer el primer paso. Según fuentes de UPyD, Antonio Hernando, secretario federal de Política Municipal del PSOE, le ha comunicado a Díez su compromiso de estudiar en la ejecutiva de su partido estas exigencias. Hernando, que ayer participaba en la reunión del Comité Federal del PSOE, ni confirmó ni desmintió tal contacto, según informa Anabel Díez. Pero el mensaje al PP fue claro: "Nadie de su dirección nacional me ha llamado", dijo Díez.
Para no desviar la atención de sus reivindicaciones, UPyD evitó hablar por la mañana con claridad de los pasos a seguir en caso de no alcanzar ese pacto global, que garantizaría el apoyo de su formación en todos los municipios en liza. "Si no hay un acuerdo [nacional], UPyD respetará la voluntad de los ciudadanos", dijo Díez. Pero no quedó claro si eso se transformará en un apoyo a la lista más votada o a la corriente mayoritaria (de izquierda o de derecha), o se dejará decidir a los concejales electos en cada plaza.
Ya por la tarde, una vez concluida la reunión del consejo político, la decisión de UPyD parecía un poco más clara: según una portavoz oficial del partido y el cabeza de lista en Alcalá de Henares, Anselmo Avendaño, las directrices trasladadas a sus ediles les impiden apoyar al PP o al PSOE si ninguno de los dos partidos se compromete a aceptar sus reivindicaciones a nivel nacional. En ese caso, se votarán a sí mismos o se abstendrán. Si al final UPyD mantiene esta decisión, el PP gobernará en todos los municipios de la Comunidad de Madrid en los que sus votos son vitales para lograr la mayoría absoluta. La Ley Electoral, en su artículo 196, indica que si un candidato no logra la mayoría absoluta del pleno, el cabeza de lista de la formación política con más votos de los ciudadanos será alcalde. Esta situación se da en los 10 casos de Madrid con el PP: Alcalá de Henares, Getafe, Villanueva del Pardillo, Brunete, Villaviciosa de Odón, Algete, Batres, Mejorada del Campo, Velilla de San Antonio y Coslada.
No obstante, el Ayuntamiento de Coslada tendrá un tratamiento "especial". Díez aseguró ayer que en ningún caso respaldarán a un candidato imputado, como es el caso del cabeza de lista del PP de esa localidad, Raúl López Vaquero.
Otra de las pocas certezas que salieron de la reunión de ayer es que ningún representante de UPyD estará en puestos de gobierno. "La razón es mantener intacta nuestra libertad de voto para condicionar la acción de gobierno", asegura un comunicado del partido. Entre otras cosas, para seguir poniendo sobre la mesa, siempre que tengan oportunidad, las dos citadas reivindicaciones.
Esto es solo el primer asalto, dicen, centrando la mira ya en las próximas citas electorales en el horizonte.
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