489 plazas que no contentan a nadie

Por una vez todos están de acuerdo. Las 489 plazas para maestro que ayer anunció la Consejería de Educación no contentan a nadie. Ni a los sindicatos, ni a la oposición, ni a la consejería ni a los aspirantes. Laura Jiménez, con 30 años y tres opositando, lo resumía de forma escueta durante la protesta que convocaron por la tarde los sindicatos: "Es una vergüenza". Unas 150 personas, según estimaciones de Europa Press, se concentraron ayer frente a la sede de la consejería con un mensaje: "100% de reposición", es decir, una plaza por cada vacante. Los manifestantes cortaron uno de los carriles de la calle de Alcalá. Estaban convocados para protestar contra la incertidumbre de su futuro (hasta ayer por la mañana no se supo el número final de plazas ofertadas) y la cita se mantuvo por la "raquítica" propuesta anunciada.

Hace casi un año, los cuatro sindicatos de la mesa sectorial (CC OO, ANPE, CSIF y UGT) acordaron con la Administración el número de plazas que se convocarían: 2.200 para este año. Pero la crisis y los recortes propiciaron que el Gobierno central fijara una disposición en la Ley de Presupuestos del Estado que suponía cubrir solo el 30% de las vacantes. La Comunidad de Madrid, como otras autonomías, dio varios bandazos hasta fijar un número. Primero anunciaron que no habría oposiciones, después que se convocarían para 2012 y, finalmente, que se harían este año. El último mensaje lo dio ayer la consejera de Educación, Lucía Figar, con las 489 plazas previstas para maestros "que en principio" podrían incorporarse el curso que viene, según anunció.

Según las estimaciones de la consejería, esa cifra respeta el 30% de tasa de reposición que fija el Gobierno central para los docentes. "La Comunidad de Madrid, nos guste o no, va a cumplir la ley", señaló ayer Figar. Y con las 489 plazas llegó el miedo y el descontento. La opositora Laura Jiménez, que trabaja de mañana en una escuela infantil de gestión directa y estudia por las tardes, teme "una avalancha" de candidatos de comunidades como Castilla-La Mancha, La Rioja, Cantabria o Canarias, cuyos Gobiernos regionales han suspendido oposiciones para este curso. Otras, como Andalucía, se saltan los límites con casi 3.800 plazas. Cubrirá el 100% de las jubilaciones y vacantes. Para evitar el enfrentamiento con el Gobierno central, Andalucía propuso recortar en otras plantillas de funcionarios públicos. El Ministerio de Política Territorial ya ha manifestado que lo ve con buenos ojos.

Los sindicatos, que reclaman desde hace semanas oposiciones en todas las autonomías, amenazan con más protestas en Madrid. "La propuesta es insuficiente para cubrir todas las necesidades que el sector tiene", reclaman desde Anpe, que pide al Gobierno regional que "recapacite". CC OO considera que la oferta "mantendrá la precariedad" laboral existente. UGT recuerda que "convocar 400 o 2.200 plazas cuesta casi lo mismo" porque las vacantes que no se cubren con fijos se suplen con profesores interinos. Y CSIF rechaza la opción de Madrid de "respetar la ley" recordando casos como Andalucía, que "también vinculadas por la ley no están dispuestas a efectuar ninguna reducción".

El secretario general del PSM, Tomás Gómez, comparte que la oferta es "insuficiente". Gómez, del mismo partido que el Gobierno central que fija la reducción, prometió ayer que si gana las elecciones el 22 de mayo dotará "de más recursos a la educación pública, lo que significa no solamente nuevas infraestructuras, sino también cubrir la oferta pública de empleo en número suficiente". La diputada Eulalia Vaquero (IU), exigió al Gobierno regional que "cumpla su compromiso".