Los controladores de Brasil abandonan la huelga tras reunirse con el Gobierno

Los aeropuertos de Brasil ha vivido una noche de caos con la suspensión de todos los despegues por la huelga de controladores aéreos. No obstante, se espera que el asunto vaya solucionándose a lo largo del día ya que el Gobierno y los sindicatos han llegado a un acuerdo para poner fin al paro, que ha provocado graves problemas, con miles de pasajeros bloqueados en los aeropuertos. El comandante de la Fuerza Aérea ha ordenado arrestar a 18 controladores en Brasilia.

Ante la gravedad de la situación, el Gobierno se ha reunido con los representantes de los controladores y con los responsables de los aeropuertos y el encuentro ha servido para desbloquear la situación y que los trabajadores depusieran su actitud, según informa la cadena de televisión TV Globo. La cadena asegura que los huelguistas han obtenido mejoras salariales, la anulación de los traslados de controladores de Brasilia a otros aeropuertos y la apertura de conversaciones para la desmilitarización del sector aeronáutico brasileño, dominado al 90% por militares y que ha sido el desencadenante de fondo de la crisis. Así, los controladores deberán volver al trabajo esta mañana.

Sin embargo, el plante de los controladores ha provocado una noche de caos en los 49 aeropuertos principales del país. Infraero, la empresa estatal que administra los aeródromos, ha informado en un comunicado que los 49 principales aeropuertos del país quedaron cerrados desde las nueve de la noche (02.00 hora peninsular española). No se permitían los despegues, sólo los aviones en tránsito han sido autorizados a aterrizar y en los aeródromos sólo estaban autorizados los movimientos de ambulancias aéreas y vuelos de autoridades civiles y militares.

Unos 200 controladores han ocupado las instalaciones de Cindacta-1, el centro de control del tráfico aéreo de Brasilia y responsable de administrar el 75% del tráfico aéreo brasileño, en protesta por lo que califican como pésimas condiciones de seguridad en el sector y abuso de autoridad de la Aeronáutica. El comandante de la Fuerza Aérea, Juniti Saito, se ha presentado en el Cindacta-1 para ordenar el arresto de los controladores en huelga. En las ciudades de Salvador y Manaus los controladores incluso habían iniciado huelgas de hambre.

Los responsables de la seguridad diaria de miles de pasajeros son subordinados a la Fuerza Aérea, por lo que piden la desmilitarización del sector, aumentos salariales, menos carga de trabajo de acuerdo a las normas internacionales y mejoras en los equipos de seguridad y radares en las torres de control. Los chequeos de pasajeros fueron suspendidos en los mostradores de las líneas aéreas en los aeropuertos de las principales ciudades del país.

Pasajeros irritados

Mientras, miles de pasajeros se han quedado atrapados en las terminales ante la imposibilidad de tomar sus vuelos. Muchos viajeros resignados se preparaban para pasar la noche en las instalaciones. Además, algunos de los pasajeros que ya habían embarcado en sus vuelos han debido esperar en las pistas hasta cuatro horas.