Las canciones de la Casa Blanca
Desde U2 a Tom Petty, pasando por Johnny Cash o Los Lobos: los candidatos a la presidencia de EE UU lanzan mensajes implícitos en su música de campaña
Desde que el ex presidente estadounidense Bill Clinton convenciera a sus electores a ritmo de La Macarena, la música se ha convertido en uno de los puntos clave de la movilización marketiniana de las campañas electorales norteamericanas. Pero es quizás en esta ocasión cuando la música ha adquirido el mayor protagonismo y variedad, en función del gusto del público. Con música melódica y rockera, pasando por el country -y dejando a un lado siempre el rap-, los candidatos pretenden asociar su nombre y su mensaje al de ídolos musicales como Bruce Springsteen o nuevas estrellas como Doug Levitt.
Según un estudio publicado por el Wall Street Journal, Hillary Clinton arrancó su campaña con Youn and I (Tú y yo) de Celine Dion, con la que invitaba a los electores a identificarse con ella. Criticada por usar una canción extranjera, que además había sido empleada en la publicidad de Air Canada, la senadora de Nueva York se cambió a Blue Sky, (Cielo azul) un tema de Park Mohr compuesto hace dos años para los astronautas de la NASA.
Barak Obama se decantó, en un principio por Signed, sealed, delivered, I am yours ( Firmado, sellado, entregado, soy tuyo) de Stevie Wonder, pero ahora se presenta bajo el rito de los irlandeses U2 y su City of blinding lights (Ciudad de luces cegadoras), que comienza con las sugerentes frases "Cuanto más ves, menos sabes, cuanto más descubres mientras vas. Supe mucho más entonces de lo que sé ahora".
Los temas de los otros candidatos demócratas lanzan, asimismo, mensajes claros. John Edwards apela al patriotismo con Our country (Nuestro país) de John Mellecamp, mientras que Bill Richardson denuncia los males nacionales con Mess we are in (El lío en el que estamos) de Los Lobos.
Los candidatos republicanos también han recurrido a la música para reforzar su campaña. Mitt Romney suplica a EE UU que se atenga a los hechos con A little less conversation (Un poco menos de conversación) de Elis Presley. Con I' won't back down (No me rendiré) de Tom Petty John McCain promete resistir hasta el final.
Entre las canciones más enigmáticas, las de los también republicanos Rudy Giuliani, que ha optado por Life is a highway (La vida es una autopista de Rascal Flatts, y Fred Thompson con I have been everywere (He estado en todas partes) de Johnny Cash.
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