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Kristen: De un hogar roto a la renuncia de un gobernador

La prostituta que ha costado el puesto al gobernador de Nueva York es de Nueva Jersey, según cuenta en su espacio en MySpace

Según cuenta ella misma, abandonó un "hogar roto" cuando tenía 17 años, un hogar en el que sufría abusos y en el que su hermano mayor ya había "reventado". Llegó a Nueva York para probar suerte en la música, sin demasiada fortuna, y sabe lo que es estar sola, abusar de las drogas, "tener y perderlo todo una y otra vez". Se llama Ashley Youmans, aunque se hace llamar Ashley Alexandra Dupré. Para el Emperor's Club VIP era Kristen, la prostituta de lujo cuyos servicios contrató el gobernador de Nueva York, Eliot Spitzer, antes adalid de la moralidad y látigo de la prostitución. Sus contactos con Kristen / Ashley le han costado puesto.

"La música es todo para mí", dice Ashley para arrancar su perfil en MySpace, que ha recibido ya a más de tres millones de curiosos. La visita a su espacio está amenizada precisamente con música, con una de sus canciones, What we want (Lo que queremos). Su música, influenciada, según cuenta, por Frank Sinatra, Lauryn Hill, Christina Aguilera o Whitney Houston, "fluye de lo que he pasado, de lo que he visto y de lo que siento", pero, pese a que asegure que vive "en lo más alto del mundo", lo cierto es que la música no le ha dado lo que ella esperaba.

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De hecho, si ahora sabemos quién es es porque la música no le ha funcionado. Lo que ahora tiene entre manos es un escándalo de prostitución que le ha costado el puesto al otrora luchador por la moralidad que era Spitzer, gobernador demócrata de Nueva York. Spitzer, el "cliente 9", solicitó los servicios de Kristen, 1.000 dólares la hora, a una red de prostitución que operaba bajo el nombre de Emperor's Club VIP. Concertó una cita con ella el 13 de febrero en el Hotel Mayflower de Washington y cayó víctima de una investigación federal sobre la red. No había sido su única cita: una investigación federal ha destapado que se había visto con chicas del Emperor's Club en al menos ocho ocasiones y se había gastado hasta 50.000 euros.

Resultado: Spitzer ha tenido que dimitir, para centrarse en "recuperar la confianza" de su familia, echando por tierra un prometedor futuro político: Algunos le veían como presidenciable demócrata.

Ella, según cuenta The New York Times, ha pasado los últimos días en su apartamento de Manhattan y compareció el lunes brevemente en el tribunal federal que se ocupa del caso y ante el que será testigo por la investigación de la red del Emperor's Club. El caso la ha sobrepasado, dice el diario neoyorquino y ella no quiere aparecer como "un monstruo" a los ojos del público.

Sobreviví

¿Sobrevivirá otra vez Ashley a una situciación complicada? No sería la primera vaz, según ella. Cuenta que abandonó su "hogar roto" cuando tenía 17 años, una decisión de la que no se arrepiente, dado que sufrió abusos. Inició un periplo por varios estados que la llevó a Nueva York en 2004 y, desde entonces, ha aprendido "lo que es tenerlo todo y perderlo una y otra vez", perder a los seres queridos, estar sola, abusar de las drogas y ser una indigente. Pero sobrevivió, gracias a su música, dice.

Su historia con la música es la típica: Conoce a un músico que, casualmente, la oye cantar -en la ducha- y decide que tiene posibilidades. La embarca en el mundillo y ella, tras unas grabaciones y actuaciones, se va a Manhattan a probar suerte. Dos años viviendo la noche para hacerse un sitio. Según lo cuenta, se diría que cree que ha triunfado: "La vida es dura a veces, pero lo conseguí. Aquí estoy y me encanta lo que soy"; "si no lo hubiera pasado mal no podría apreciar los buenos tiempos". Todo para presentar su What we want, su "último tema", "inspirado en un chico que me enseñó a no confundir mis sueños con los sonidos de la ciudad".

Imagen obtenida de MySpace de Ashley Alexandra Dupré.
Imagen obtenida de MySpace de Ashley Alexandra Dupré.AP

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