"No pidamos calidad alemana a precio tercermundista"

Manuel Pizarro sacó ayer la artillería pesada. El presidente de Endesa reivindicó a la eléctrica como el primer inversor privado de Cataluña y manifestó su "orgullo" por el "alma catalana" de la compañía. Consciente de su imagen de "malo de la película" en Cataluña, como le llamó el convergente Oriol Pujol, Pizarro soltó todo un torrente de cifras para demostrar la apuesta de Endesa en Cataluña. En resumen, destacó los 5.229 millones de euros invertidos entre 2002 y 2006, casi la mitad en distribución, y anunció los 3.375 previstos hasta 2009. En total, cifró un total de 9.000 millones bajo su presidencia en la eléctrica. "Lo he hecho para poder venir aquí a dar la cara", enfatizó.

Y lo hizo. Pizarro compareció en el Parlament bien pertrechado de datos para dar cuenta de las inversiones en Cataluña y demostrar que la responsabilidad del grave apagón en Barcelona recae en Red Eléctrica Española (REE). No obstante, admitió que es necesario reforzar las infraestructuras eléctricas para abastecer una demanda que crece -ante las constantes críticas de los diputados sobre la calidad del suministro- y aseguró que la tarifa no compensa de forma suficiente la distribución. "No podemos pedir calidad alemana a precio tercermundista", dijo.

El presidente de Endesa lamentó que a todos los gobiernos les tiembla el pulso a la hora de subir las tarifas de la luz, con lo cual suben los precios de generación pero se congelan los de distribución eléctrica.

Las críticas se extendieron también al conjunto del sistema eléctrico español. "El peor sistema que tenemos es el nuestro, no sabemos si está liberalizado o no, así que si se liberaliza, que se haga de verdad, y si se nacionaliza, también".

En cuanto al monopolio que Endesa tiene en Cataluña, recalcó que la situación se repite en el resto de España con otras compañías, ya que no tiene sentido duplicar las redes, y señaló que "lo que tiene que haber es una regulación bien hecha, cosa que no tenemos".

Pizarro también tuvo reproches para los gobiernos autónomos y municipales. Criticó las trabas burocráticas a las que se enfrenta la compañía para poder poner en marcha nuevas redes y centrales y los culpó del retraso en algunos proyectos, como las 20 subestaciones pendientes de instalar en el territorio catalán.

Citando varios informes técnicos de distintas universidades, aseguró que la caída del cable de Endesa sobre la estación eléctrica de Collblanc, propiedad de REE, se debió a las propias deficiencias en la red de transporte de esta empresa, ya que el cable era reglamentario y estaba en buen estado. Y, en cualquier caso, el incidente se hubiese quedado reducido a un apagón de unos minutos para 20.000 abonados de no ser por otros incidentes en otros puntos de la red también responsabilidad de REE. Además, recalcó que desde el 5 de junio la red de transporte ya había sufrido 60 incidentes.