El 'número dos' del PSOE andaluz dimite como diputado
Rafael Velasco acusa al PP de una "cacería política" contra su familia
Otro boquete para José Antonio Griñán. Tras un año de cambios constantes en el Gobierno andaluz y en el partido, ayer, el número dos del PSOE de Andalucía, Rafael Velasco, presentó su dimisión como diputado en el Parlamento autónomo por la provincia de Córdoba. Velasco alega razones estrictamente personales para justificar su decisión, a raíz de lo que considera una "campaña de difamación, de injurias y de calumnias" por la actividad profesional de su esposa, Antonia Montilla, en la sociedad Aula Cinco. Esta empresa se dedica a dar cursos de formación a desempleados y recibió ayudas de la Junta de Andalucía en los últimos cuatro años por 726.209 euros, lo que "supone un 0,64% de las ayudas a la Formación Profesional para el Empleo que se distribuyen en la provincia de Córdoba", según informó la Consejería de Empleo, en contestación a las informaciones publicadas por el diario El Mundo.
Velasco llegó ayer a su despacho en la sede del PSOE andaluz con la decisión tomada, una vez que su esposa -que tiene un embarazo de alto riesgo- tuvo que ser ingresada en un hospital la noche anterior. En un comunicado del PSOE se alude a que "visto cómo se está resintiendo su vida familiar" y el estado de su esposa, renuncia a su escaño "para dedicarle un mayor tiempo a su familia". En la nota, acusa al PP de una "cacería política" contra él y su familia.
En las conversaciones que mantuvo ayer con el secretario general y presidente andaluz, José Antonio Griñán, y con la consejera de la Presidencia, Mar Moreno, entre otros, ninguno pudo convencerlo de que mantuviera su acta. Griñán no le aceptó su dimisión como vicesecretario general.
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