Zapatero se entrevistará con Montilla para reforzar el Estatuto
El presidente considera la norma "básicamente constitucional", se declara "satisfecho" y cree que "las aguas se serenarán al pasar los días" en Cataluña
Existía mucha expectación, sobre todo en Cataluña, por la valoración que José Luis Rodríguez Zapatero podía hacer sobre la sentencia del Tribunal Constitucional del Estatuto de Cataluña por haber sido un entusiasta impulsor de esa norma autonómica y por la reacción crítica de los partidos catalanes. Pero Zapatero se ha hecho esperar tres días. Aprovechó ayer una comparecencia pública, con motivo de su encuentro en La Moncloa con el ex primer ministro británico Tony Blair, para hacer su primer comentario. Esos tres días le han servido para tener una visión más clara de la reacción de los partidos catalanes y de su alcance ante el fallo del Estatuto y, de ese modo, tratar de afinar con su mensaje ante un asunto tan sensible.
"Con la sentencia llegará el fin de la descentralización política catalana"
Su intervención, ayer, fue previsible. Dirigió un mensaje conciliador hacia la Generalitat y los partidos catalanes después de aclarar que el alto tribunal ha concluido que el Estatuto es "básicamente constitucional porque garantiza más del 90% del contenido del Estatuto", y de dejar sentado que se sentía "satisfecho" por el resultado.
Zapatero llevó su actitud conciliadora con el presidente catalán, José Montilla, al máximo posible tratando de entender su reacción crítica hacia la sentencia. Se comprometió a atender su petición de un próximo encuentro. Todo apunta que se celebrará una vez que se conozca el contenido completo del fallo el próximo 11 de julio. Pero se comprometió, sobre todo, a analizar la sentencia con Montilla y "en su caso, si hubiera que tomar alguna iniciativa para reforzar lo que es el esfuerzo de desarrollo del Estatuto que hemos hecho". Esto es, que está dispuesto, en la medida de lo posible, a recuperar por vía legal aquellos aspectos del texto estatutario que han quedado amputados por la sentencia.
Uno de ellos, la creación del Consejo General del Poder de Judicial de Cataluña, eliminado del Estatuto por la sentencia, puede recuperarse por la vía de una ley orgánica, tal y como apunta el propio fallo.
Pero Zapatero puso ayer énfasis en que los aspectos amputados eran muy escasos. Insistió en que la sentencia no solo mantiene los aspectos básicos del Estatuto que refrendó el pueblo de Cataluña hace cuatro años sino que es "una garantía del máximo autogobierno que ha tenido Cataluña en su historia y que ninguna otra mayoría o ley estatal podrá cuestionar el respaldo que el tribunal hace del autogobierno en Cataluña".
E, incluso, vaticinó que así se verán las cosas en Cataluña "cuando se serenen las aguas, pasen los días y se lea el contenido" con la convicción de que buena parte de la reacción crítica de los partidos catalanes está causada por la cercanía de las elecciones en esa comunidad.
Zapatero reforzó la idea de que la sentencia se acabará juzgando positiva en Cataluña con una mirada al pasado, a la propia negociación del Estatuto. "Primero había dudas de que se aprobara. Cuando se aprobó, a algunos no les gustaba en Cataluña y otros dijeron que España se rompía. Hoy parece que el Estatuto todo el mundo lo defiende en Cataluña". Recordó que lo mismo pasó con la financiación autonómica.
Y remató: "La sentencia va a ser el tercer episodio y tendrá el mismo resultado final. Con ella llegará el fin de un proceso de ampliación de la descentralización política y de reconocimiento de más identidad de Cataluña dentro de la España constitucional. Se ha logrado el objetivo".
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