Zapatero busca un pacto de Estado con Rajoy ante la crisis

Tras su intervención en el Congreso el próximo miércoles, donde inaugurará el curso parlamentario con un debate sobre la crisis económica, José Luis Rodríguez Zapatero convocará al líder del PP, Mariano Rajoy, con la pretensión de alcanzar acuerdos para afrontarla, pese a las diferencias de fondo que les separan. "Vamos a intentarlo", dijo ayer Zapatero en Onda Cero.

La Moncloa no quiere crear grandes expectativas porque parte de la base de que Rajoy ha hecho de la crisis el territorio básico de oposición al Gobierno. Por ello, Zapatero esperará a conocer la actitud del líder del PP en el debate del miércoles. El presidente -que ya ha anunciado su disposición a buscar este mismo pacto en anteriores ocasiones, la última hace justo un año- se ha fijado como objetivo mínimo el pacto con el PP sobre educación y sobre la política energética, dos piezas que considera básicas para salir de la crisis. "Voy a pelear por ello con toda la fuerza", afirmó.

Sebastián y Gabilondo inician contactos con el resto de partidos

Salgado y Chaves comparecerán cada semana para hablar de la economía

Los ministros de Industria, Miguel Sebastián, y de Educación, Ángel Gabilondo, ya han iniciado los contactos con los partidos para buscar ese acuerdo. Zapatero se reunió el viernes con patronal y sindicatos, tras la ruptura del diálogo social en julio, para abordar medidas contra la crisis y tratar de garantizar la paz social durante el otoño, amenazada por el alto índice de desempleo previsto.

Intensificar el diálogo será una de las columnas de la acción política frente a la intensidad de la crisis. Fue una de las conclusiones de la reunión que mantuvo el martes en La Moncloa con sus tres vicepresidentes -María Teresa Fernández de la Vega, política; Elena Salgado, económica, y Manuel Chaves, de Política Territorial-. En ese encuentro quedó establecida la estrategia y la agenda del Gobierno para el primer trimestre del curso político.

La reunión abordó otra de las deficiencias atribuidas a Zapatero, la escasa presencia pública de su equipo y los problemas de coordinación, con el consiguiente desgaste del presidente. Salgado se comprometió a comparecer regularmente los jueves, tras la reunión de la Comisión Delegada de Asuntos Económicos, para dar cuenta de la política del Gobierno frente a la crisis. Chaves comparecerá regularmente los martes. Y Fernández de la Vega reforzará la labor coordinadora del Ejecutivo.

La agenda del Gobierno tendrá como eje básico la Ley de Economía Sostenible, anunciada en el debate sobre el estado de la nación, el pasado mayo, y cuyas líneas generales Zapatero explicará el próximo miércoles en el Congreso. Su intención es presentar el anteproyecto de ley en el Consejo de Ministros del 16 de octubre.

El Ejecutivo pretende con esta ley articular incentivos para un nuevo modelo económico -tecnologías modernas, eficiencia energética, etcétera-, incluido un crédito a las empresas de 20.000 millones de euros para ir sustituyendo la economía del ladrillo por otra más diversificada; eliminar trabas burocráticas para agilizar la actividad empresarial y adaptar la formación profesional a las necesidades económicas, entre algunas de sus líneas básicas.

"Si el contexto internacional ayuda y acertamos, podemos entrar en la senda de recuperación clara a mediados de 2010", aseguró Zapatero en Onda Cero. El presidente cuenta con que el periodo de la presidencia española de la UE, en el primer semestre de 2010, coincida con la etapa de reactivación económica internacional y sirva de estímulo político para España.

Zapatero está empeñado en salvaguardar su política de reactivación económica, y la política social frente a la crisis, del drástico recorte presupuestario que ha anunciado a sus ministerios y que hace prever un pulso entre ellos en los próximos días. En concreto, 15.000 millones del aumento de la factura del desempleo tendrán que ser absorbidos por los departamentos no afectados por el gasto social. "Mantener la cohesión social en época de crisis es una prioridad de mi Gobierno", dijo ayer el presidente.

Hoy, en el mitin con el que cada año abre el curso político en la romería minera de Rodiezmo (León), se comprometerá a mantener su política social frente a la crisis: las pensiones, el salario mínimo interprofesional y el presupuesto de la Ley de Dependencia que ayer precisó que sería de 1.500 millones de euros. Asimismo, el Consejo de Ministros del 2 de octubre aprobará un nuevo plan municipal de choque, dotado con 5.000 millones de euros y destinado a inversión, para paliar el alto índice de paro previsto.

Paralelamente a la Ley de Economía Sostenible, sobre la que el Gobierno hablará con partidos y agentes sociales a la búsqueda de un amplio consenso, será tramitada la reforma de la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (LOFCA), que recoge el nuevo modelo de financiación sellado en julio, y los Presupuestos de 2010. La primera será previsiblemente aprobada por el Consejo de Ministros el día 11, y el proyecto de Presupuestos, el 26.

Para sacar adelante este paquete legislativo en las Cortes, el Gobierno pretende atraerse a la izquierda -IU, ICV, ERC y BNG- sin olvidar a Coalición Canaria, PNV y Nafarroa Bai, además de UPN. Coalición Canaria, que gobierna las islas, tendrá el estímulo de las medidas que el Consejo de Ministros adoptará para su territorio en una reunión especial que celebrará en Canarias el 9 de octubre. El Ejecutivo confía en que la tramitación paralela de la ley de financiación autonómica y los Presupuestos allane el camino para el pacto presupuestario con los partidos catalanes ERC e ICV.

En el terreno de la ampliación de derechos, que al Gobierno le resulta rentable para consolidar una posición progresista, Zapatero apostará este curso por la Ley de Libertad Religiosa, la de igualdad de trato y la de acceso a la información, además de la tramitación de la nueva ley del aborto.