Matas deberá pagar una fianza civil de 1,6 millones por el caso del 'calatrava'

El expresidente de Baleares Jaume Matas, del PP, deberá pagar una fianza de responsabilidad civil de 1,6 millones de euros por el caso Ópera, un proyecto para la construcción de una ópera sobre la bahía de Palma del arquitecto Santiago Calatrava, según decretó ayer el juez instructor del caso Palma Arena en un auto de más de cien folios.

Hace tres semanas, Matas justificó como "una decisión política" el gasto en 2007 de más de 1,2 millones de euros de las arcas públicas para comprar el proyecto del arquitecto, también imputado en el caso. "Decidimos adquirir un calatrava", se limitó a decir entonces el expresidente balear ante el juez. "Por desgracia" la decisión judicial "no me sorprende", comentó ayer Matas, que recurrirá ante la Audiencia Provincial la decisión de fijarle la nueva caución para afrontar sus eventuales compensaciones a las arcas públicas en caso de ser condenado.

El expresidente balear y exministro de Medio Ambiente pagó el año pasado una fianza personal de tres millones de euros para eludir la cárcel por el caso Palma Arena, en el que el juez le acusa de un supuesto enriquecimiento ilícito y actuaciones sospechosas de delito.

Matas aseguró que tiene todo su patrimonio y el de su esposa hipotecado para asegurar el crédito de la primera fianza: un piso-palacete y dos propiedades menores más en Palma y un apartamento de verano en Sa Colònia.

En el auto hecho público ayer, el juez solicita además al Parlamento balear que certifique que Francesc Fiol, imputado también en el caso Ópera por haber tramitado el expediente de pago y la contratación de Calatrava, es efectivamente diputado de la Cámara. Cuando reciba la certificación, el juez pedirá al Tribunal Superior de Justicia que asuma la competencia del caso.

Desde Valencia, la coordinadora de Esquerra Unida (EU), Marga Sanz, reclamó a los bancos y cajas de la Comunidad Valenciana que no pongan "ni un euro" para la nueva fianza. Matas gestionó su hipoteca desde el Banco de Valencia de Bancaja.

Mientras tanto, la antigua dirección de Unión Mallorquina (UM) -que está pendiente de la petición de la fiscalía de 1,6 millones de responsabilidad civil por el supuesto uso de fondos públicos en la captación de militantes y votantes- maniobró ayer registrando el nuevo partido Convergència per les Illes. El exconsejero balear de UM Miquel Ángel Grimalt, imputado en un caso de supuesta corrupción, se dio de baja como militante y renunció al escaño en el Consell. También dimitió la exvicepresidenta Catalina Julve, imputada en otra causa.

Por su parte, la ex número dos de Unió Mallorquina en Palma, la ex teniente de alcalde Cristina Cerdó, depositó ayer en el juzgado los 300.000 euros de fianza personal que le impuso el juez Francisco J. Pérez tras su detención por el caso de la trama de votantes.