Uno de cada dos funcionarios que se jubile en 2010 en Francia no será reemplazado

El secretario de Estado francés para la Función Pública, Georges Tron, corroboró ayer en una entrevista las informaciones que, a cuentagotas, llevan saliendo de El Elíseo desde la primavera de 2009: el Gobierno presidido por Nicolas Sarkozy suprimirá este año uno de cada dos puestos en la función pública. La mitad de las plazas ocupadas por funcionarios que se jubilen en 2010 desaparecerá.

"Que las cosas queden claras: el empleo público, incluidos los hospitales, ha aumentado en los últimos años en Francia. Para invertir esta tendencia, continuaremos aplicando, estrictamente, el principio de no sustitución de uno de cada dos funcionarios", ha declarado Tron al rotativo económico francés Les Échos. En Francia (2,5 millones de funcionarios) el empleo público lleva en realidad eliminándose desde, al menos, 2007, año en que Sarkozy accedió a la presidencia. Aquel año se esfumaron 11.000 puestos; 28.000 en 2008; 30.600 en 2009 y, para este año, se espera que se extingan no menos de 34.000.

El número de funcionarios que, se prevé, se jubilen este año es de 68.000, el doble de los puestos que París quiere cercenar. "La regla deberá aplicarse también estrictamente a los operadores del estado (Météo France -servicio de meteorología-, museos, etcétera), pero excluye a otros departamentos como los ministerios ("no podemos seguir reduciendo efectivos").

"No he sido nombrado secretario de Estado para fustigar a los funcionarios. Tengo un profundo respeto por los agentes. Examinaremos exhaustivamente su situación. El cálculo de su pensión está basado en los seis últimos meses de salario, mientras que en el sector privado se estiman los últimos 25 años". Preguntado sobre si es necesario elevar el cómputo de las cotizaciones a pagar por los funcionarios, Tron ha advertido que "esta cuestión no debe hacernos olvidar otras que han de ser debatidas. La tasa salarial es menor en el empleo público (7,85%) que en el privado (10,55%). Algunos sindicatos consideran que hay que elevar la cotización de los funcionarios, pero que la política salarial debe compensar este aumento. Aumentar en un punto las cotizaciones nos permitirá ganar 600 millones de euros al año".

Respecto a la representación sindical (está previsto que el diálogo social se reactive en Francia este mismo mes), Tron ha sido "prudente": "Existe un equilibrio interno e histórico de los sindicatos que no conviene revolver demasiado. De lo que se trata es de reforzar el diálogo en sí". Un acuerdo en este marco es sólo válido si es firmado por sindicatos que representen una base electoral superior al 50%. El último pacto salarial fue asumido en Bercy (sede del Ministerio de Economía) en junio de 2008 por el Ejecutivo de centro-derecha y otras seis centrales sindicales, entre ellas la mayoritaria CGT.